¿Qué hacer si se me avería el coche en la carretera?

Saber cómo actuar en cada momento resulta crucial para minimizar estos posibles riesgos y que el percance quede solo como una anécdota o un mal recuerdo. Es por ello que, a continuación, te detallaremos qué hacer en caso de sufrir una avería o de presenciar un accidente.

QUÉ DICE LA NORMATIVA

Para mejorar la seguridad y establecer las condiciones óptimas para los servicios de ayuda y rescate, en este tipo situaciones, se ha aprobado una norma de referencia, el Real Decreto 159/202,1 que regula el auxilio en la vía pública, y que viene a modificar otras normas como el Reglamento General de Vehículos y el Reglamento General de Circulación. Los cambios más significativos son los siguientes:

• La operación de auxilio en carretera ya sea de reparación o retirada, deberá realizarse de la manera más segura posible para todos los usuarios de la vía, implicados o no en el incidente.
• Cada operario de auxilio en carretera deberá comunicarse telemáticamente con la autoridad de Tráfico y dar su posición a través de su plataforma DGT 3.0 para que se tenga constancia del incidente y poder avisar al resto de los usuarios mediante diferentes canales de información, como los paneles variables o mediante el triángulo virtual de la señal V-27.
• Los vehículos de auxilio tendrán preferencia de paso, pudiendo estacionar en vía pública para realizar su trabajo. Deberán reforzar su visibilidad con distintivos reflectantes en un tercio de la superficie –lateral, frontal y trasera–.
• Cada operario de auxilio en carretera deberá estar debidamente formado, y deberán inscribirse, junto con sus vehículos asociados, en un Registro Estatal de Auxilio en Vías Públicas –REAV–.
• Se sustituirán los triángulos de señalización por un dispositivo luminoso V-16.
• Se crea la señal V-27, un "triángulo virtual" que se activará en el sistema de "a bordo" del vehículo y advertirá la presencia de un peligro cercano. Sólo disponen de esto los vehículos conectados, de modo que no será obligatoria

Otro de los cambios será la incorporación de una serie de señales obligatorias en las grúas para hacerlas más visibles y garantizar la seguridad, en concreto las señales V-2, V-23 y V-24.

QUÉ DICE LA LEY

El Reglamento General de Circulación, en su capítulo VI, Comportamiento en caso de emergencia, artículo 129 Obligación de auxilio, regula como se debe actuar en caso de ser testigos o estar implicados en un accidente:

1. Los usuarios de las vías que se vean implicados en un accidente de tráfico, lo presencien o tengan conocimiento de él estarán obligados a auxiliar o solicitar auxilio para atender a las víctimas, si las hubiera, prestar su colaboración para evitar mayores peligros o daños, restablecer, en la medida de lo posible, la seguridad de la circulación y esclarecer los hechos –artículo 51.1 del texto articulado–.
2. Todo usuario de la vía implicado en un accidente de circulación deberá, en la medida de lo posible:

Detenerse de forma que no cree un nuevo peligro para la circulación.

• Hacerse una idea de conjunto de las circunstancias y consecuencias del accidente, que le permita establecer un orden de preferencias, según la situación, respecto a las medidas a adoptar para garantizar la seguridad de la circulación, auxiliar a las víctimas, facilitar su identidad y colaborar con la autoridad o sus agentes.
• Esforzarse por restablecer o mantener la seguridad de la circulación y si, aparentemente, hubiera resultado muerta o gravemente herida alguna persona o se hubiera avisado a la autoridad o sus agentes, evitar la modificación del estado de las cosas y de las huellas u otras pruebas que puedan ser útiles para determinar la responsabilidad, salvo que con ello se perjudique la seguridad de los heridos o de la circulación.
• Prestar a los heridos el auxilio que resulte más adecuado, según las circunstancias, y, especialmente, recabar auxilio sanitario de los servicios que pudieran existir al efecto.

• Avisar a la autoridad o a sus agentes si, aparentemente, hubiera resultado herida o muerta alguna persona, así como permanecer o volver al lugar del accidente hasta su llegada, a menos que hubiera sido autorizado por éstos a abandonar el lugar o debiera prestar auxilio a los heridos o ser él mismo atendido; no será necesario, en cambio, avisar a la autoridad o a sus agentes, ni permanecer en el lugar del hecho, si sólo se han producido heridas claramente leves, la seguridad de la circulación está restablecida y ninguna de las personas implicadas en el accidente lo solicita.
• Comunicar, en todo caso, su identidad a otras personas implicadas en el accidente, si se lo pidiesen; cuando sólo se hubieran ocasionado daños materiales y alguna parte afectada no estuviera presente, tomar las medidas adecuadas para proporcionarle, cuanto antes, su nombre y dirección, bien directamente, bien, en su defecto, por intermedio de los agentes de la autoridad.
• Facilitar los datos del vehículo a otras personas implicadas en el accidente, si lo pidiesen.

   3. Salvo en los casos en que, manifiestamente, no sea necesaria su colaboración, todo usuario de la vía que advierta que se ha producido un accidente de circulación, sin estar implicado en él, deberá cumplimentar, en cuanto le sea posible y le afecten, las prescripciones establecidas en el apartado anterior, a no ser que se hubieran personado en el lugar del hecho la autoridad o sus agentes.

CÓMO ACTUAR EN CASO DE AVERÍA

Ahora que ya sabemos qué dice la normativa vamos a ver cómo proceder si se nos avería el coche, sin posibilidad de continuar la marcha, y hacerlo de manera segura, minimizando una situación mayor de riesgo.

1. Busca un lugar seguro. En caso de vernos obligados a detenernos, ya sea por un pinchazo o una avería estacionaremos el coche en un emplazamiento fuera de la calzada y evitar así provocar un accidente.
2. Vigila las zonas de baja visibilidad. Un cambio de rasante, un túnel, una zona de curvas o de desniveles son lugares en los que debemos evitar detenernos.
3. Luces de emergencia. Señalizar inmediatamente la posición encendiendo las luces de emergencia y las de posición, si es de noche.

    4. Señalizar. Si hemos sufrido una avería debemos avisar al resto de usuarios lo antes posible haciéndonos visibles usando los triángulos de señalización de peligro o la nueva luz V-16. Si vamos a utilizar los triángulos, antes de abandonar el vehículo para colocarlos, deberemos ponernos el chaleco reflectante.

   5. Ubicación de los triángulos. Éstos deben colocarse:  – Carretera de doble sentido: 50 metros por detrás y por delante del vehículo  – Carretera de sentido único y más de un carril: 50 m por detrás, siendo visible para el resto de los conductores a 100 m.

   6. Llama al servicio de asistencia. En caso de avería o pinchazo es recomendable que no sea el propio conductor el que intente repararlo ya que esto aumenta el riesgo y la probabilidad de atropello. Lo más seguro es avisar a nuestro servicio de asistencia en carretera.

   7. Dejar el vehículo. Mientras esperamos a la asistencia, deberemos hacerlo con las máximas condiciones de seguridad y siempre con el chaleco reflectante puesto. No invadir la vía bajo ningún concepto saliendo del vehículo por el lado contrario al flujo de la circulación.

   8. Dónde situarme. Siempre que sea posible, colócate fuera de la vía, en un lugar seguro, detrás de las protecciones de la carretera. Si no podemos abandonar el vehículo en condiciones de seguridad, es mejor permanecer en el interior, con el cinturón de seguridad abrochado.

  9. Llegada de asistencia. Una vez lleguen los técnicos de auxilio en carretera al lugar, deberemos seguir sus indicaciones en todo momento, ya que están formados para aplicar los protocolos de seguridad necesarios para realizar la actividad de la manera más segura.

CÓMO ACTUAR EN CASO DE ACCIDENTE: PROTOCOLO PAS

La forma de actuar en caso de tener o presenciar un accidente es similar en cuanto a cómo señalizar la zona en caso de avería, pero completamente diferente cuando hablamos de personas ya que rapidez de actuación es muy importante. Los primeros minutos tras producirse un siniestro son fundamentales para conseguir que las emergencias lleguen lo antes posible al lugar de lo ocurrido y puedan atender a los posibles heridos.

Existe un protocolo, denominado P.A.S, que nos dice cómo actuar de manera rápida y clara, y no perdamos minutos que podrían ser vitales para los heridos. Existen tres fases de actuación que detallamos a continuación:

  1. (P) Proteger. Hemos de salvaguardar, en la medida de lo posible, el lugar del accidente para evitar que otros motoristas puedan colisionar con el vehículo accidentado y la situación se agrave.

- En caso de presenciar un accidente, debemos detenernos en un lugar seguro, donde nuestro vehículo no entorpezca a otros ni a los servicios de emergencia a su llegada y ponernos el chaleco reflectante para salir.

- Colocar la señal de visualización de peligro, bien sea el dispositivo luminoso (a partir del 01 de julio), o los triángulos, siguiéndolos criterios mencionados en el apartado anterior.

- Utilizar luces de emergencia, o situarnos en lugar seguro y visible haciendo señales con los brazos para que el resto de conductores aminore la velocidad.

-. Si las condiciones de visibilidad no son buenas, utilizar prendas u objetos reflectantes, linterna, o la linterna del móvil para alertar de la presencia del vehículo accidentado en la vía.

  2. (A) Avisar. La rapidez en la llamada al 112 facilitará que los servicios de emergencia lleguen lo antes posible al lugar del siniestro.

- Poner en aviso a los servicios de emergencia. La llamada es gratuita.

- Indicar de la forma más precisa posible: lugar de ocurrencia (ciudad más próxima, punto kilométrico, salida de la autovía o autopista, o indica tu posición desde las aplicaciones móviles especificas para ello), número de heridos, gravedad de los mismos, si hay niños, riesgo de incendio, etc.

- No colgar el teléfono hasta que ellos nos lo indiquen.

3. (S) Socorrer. Se podrá ayudar siempre que sepamos hacerlo de manera adecuada para no ocasionar o agravar las lesiones de los heridos.

- Evaluar estado de éstos para atender primero a los más graves.

- No intentar sacar a los heridos del vehículo, ni moverlos, a no ser que sea estrictamente necesario (por ejemplo, si el vehículo está ardiendo y las consecuencias de no moverlos van a ser más graves).

- Si el herido es un motorista, nunca quitarle el casco.

- No dar nunca a los heridos ningún tipo de bebida, ni alimentos o medicamentos.

- Podemos taparles con una manta o alguna prenda de abrigo si tienen frío.

- Procurar, si están conscientes, que no pierdan la consciencia en ningún momento hablándoles, haciéndoles preguntas sobre lo ocurrido, y sobre todo, tratar de tranquilizarles.

- Permanece en el lugar del accidente hasta que los servicios de emergencia te lo indiquen.