Alex Palou: la historia de mi fichaje por Chip Ganassi

Este fichaje se comenzó a gestar hace varios meses, sobre todo a partir de las 500 Millas de Indianápolis en el mes de agosto. Estuvimos dos semanas el óvalo entre los entrenamientos y la carrera, así que encontré un momento para pasear por el paddock y hablar con la gente. Un día me acerqué a donde estaba Chip Ganassi para presentarme en persona y decirle que quería correr para él algún día. Ése fue el principio de nuestra relación, aunque entonces no podía prever que un comentario tan inocente acabaría cristalizando en algo tan grande.

A lo largo de mi carrera siempre he hablado con equipos grandes y equipos pequeños, y he aprendido que no puedes dar nada por seguro hasta que no tienes firmado el contrato. En este caso, el descaro de presentarme en Indianápolis ayudó y nuestras actuaciones en esas dos semanas fueron cruciales. Nuestro nombre estuvo muy arriba muchos días y nos vio mucha gente. Las cosas se enfriaron un poco después de la Indy500, pero mi spotter y representante Roger Yasukawa –que es quien me ayudó a dar el salto desde Japón– mantuvo vivo el contacto y negoció con éxito un acuerdo. Las cosas se aceleraron estas últimas semanas, pero no he sabido de la oficialidad mucho antes que vosotros.

Que fiche por Chip Ganassi después de mi primer año en la IndyCar hace que esta temporada debut haya sido un auténtico éxito, porque he cumplido el objetivo que me había marcado: brillar en la pista y dejarme ver para conseguir –rezando un poco– que un equipo grande se diera cuenta de que estoy aquí para triunfar. No ha sido nada fácil llegar a este punto, porque sabéis bien que ha sido un año con bastantes complicaciones, pero lo hemos conseguido y ahora podemos decir que todo ha valido la pena. De ahora en adelante estamos en un equipo ganador.

Siempre es bueno ver que hay equipos que se interesan por ti, pero cuando lo hace el campeón de la IndyCar… ¿Cómo puedes decir que no? En última instancia yo quería seguir un año más en la categoría, así que verme en el mejor equipo de la parrilla es absolutamente extraordinario. Estaré rodeado de superestrellas. Tendré a mi lado a un seis veces campeón de la IndyCar, Scott Dixon, a un siete veces campeón de la NASCAR, Jimmie Johnson, y a un piloto con cinco años de experiencia en la Fórmula 1, Marcus Ericsson. Es una alineación brutal. Son unas bestias y saben un montón, y eso me ayudará a acelerar mi aprendizaje. Aún no los he visto desde el anuncio, pero hemos hablado y nos llevamos bien. Lo único malo que tiene es que todos son tan famosos que me tocará hacerles de fotógrafo cuando un fan les pida un autógrafo, pero ya llegará nuestro momento.

Este fichaje también cambia drásticamente mi situación personal como piloto de IndyCar. Chip Ganassi ha creído en mi porque piensa que puedo tener un futuro, que puedo hacer grandes cosas en este equipo. No me han pedido que aporte un presupuesto, sino que han apostado por mí. Es muy distinto a estar en un equipo pequeño, porque ahí sí que necesitas patrocinadores o acompañamiento económico. El año pasado, por ejemplo, fue financiado por Honda y el Team Goh, que apostó por mí desde mis días en Japón. El objetivo del Team Goh siempre fue ayudarme a llegar a la IndyCar, darme una plataforma que me sirviera de presentación. Una temporada después, puedo decir que ha valido la pena. Volaré libre a partir de ahora, pero siempre les estaré agradecido por todo lo que han hecho por mí. De hecho, de algún modo mantendremos el contacto porque seguiré con mi spotter.

Soy consciente de que estoy ante la mayor oportunidad de mi carrera, porque no todos los días fichas por la Mercedes o la Ferrari de Estados Unidos. Gente importante ha creído en mí en el año más difícil que recuerdo, no sólo a nivel deportivo por la falta de entrenamientos, sino también en lo económico por todas las complicaciones del COVID-19. Todo el mundo tiene problemas de presupuesto, pero incluso en un escenario tan desfavorable ha habido alguien que ha apostado por nosotros. Conseguir el mejor asiento de la IndyCar en estas condiciones no tiene nombre.

Nuestra actuación en la Indy500 fue crucial para conseguir este contrato

Este jueves estuve en la fábrica del equipo, que está en Indianápolis. No era una simple visita de cortesía, sino que tenía que hacerme un asiento y conocer a todo el personal, porque en breve iremos a los circuitos para empezar a trabajar juntos de cara a 2021. Este lunes estaremos en Barber para hacer un test –llegamos ayer– y un poco más adelante iremos a Laguna Seca. Los dos entrenamientos serán súper útiles, no sólo porque podré conocer a todo el mundo, sino porque también podré aprenderme dos circuitos que aún no conozco y que estarán en el calendario del año que viene. Adelantamos trabajo.

De mi visita a la fábrica, me quedo con la sensación de que Chip Ganassi es muy grande. Sabes de antemano que son una de las mayores estructuras de Estados Unidos, pero creo que no lo interiorizas de verdad hasta que lo ves con tus propios ojos y te paseas por sus instalaciones. Hasta ahora yo trabajaba con tres ingenieros y cuatro mecánicos, pero aquí debe de haber un centenar de personas. Sólo sé que me presentaron a un montón de gente y que no era capaz de retener todos los nombres. Y no es sólo el personal, sino que el desarrollo tecnológico también es muy grande. Chip Ganassi tiene máquinas para fabricar piezas propias, de modo que depende menos de Dallara que otras estructuras más modestas. Estoy seguro de que el hecho de contar con un equipo de la NASCAR también nos acaba beneficiando en la IndyCar, porque al final tienen mucha más experiencia que nadie que yo conozca.

Otro factor donde también saldré ganando es en el simulador, que está muy cerca de nuestra sede. En la IndyCar, cada motorista tiene un simulador de última generación y sus clientes pueden acceder a él un determinado número de días al año. Este 2020 no habré hecho más de cinco o seis días de trabajo en el simulador, pero estando en Chip Ganassi tendré manga ancha para poder rodar mucho más, lo cual también es fantástico para acelerar mi adaptación a la categoría.

Me ha quedado muy claro que en este equipo se viene a ganar. La gente ficha por las mañanas sabiendo que el objetivo es terminar primeros. Si terminan segundos, es que algo ha ido mal. Es la primera vez en toda mi carrera profesional que estoy en esta posición, porque la voluntad de ganar la tienes siempre, pero nunca había tenido en mis manos un monoplaza capaz de ganar carreras y campeonatos de forma consistente.

Correr para Chip Ganassi supondrá una presión añadida para mí, como no podría ser de otra manera. Sé que ahora la pelota está en mi tejado, porque tengo un coche ganador y una oportunidad. Tengo a mi disposición los recursos necesarios para pelear por la victoria. Si no peleo por ella, es que tengo un problema. Afortunadamente, en una estructura tan profesional sé que todo irá como la seda y que podré concentrarme únicamente en aquello que importa de verdad: ser rápido en el circuito.

El cambio de equipo también implica varias cosas, como que a partir de ahora deje de llevar el dorsal 55 para adoptar el número 10 o que abandone los colores negro y rosa que me han acompañado desde que comencé a correr para el Team Goh en Japón. Aún no sé cómo será mi monoplaza en 2021, aunque estos últimos años el coche número 10 ha sido azul y negro por el patrocinio de NTT Data. Yo luciré los sponsors del equipo. Sé que Guarenteed Rate está interesado en seguir conmigo, porque apostaron por mí desde las 500 Millas de Indianápolis y están muy contentos, pero tendremos que esperar un poco para ver si es posible.

Os doy a todos las gracias por los mensajes de felicitación que he recibido estos últimos días, porque la reacción ha sido espectacular. Fue publicar el comunicado oficial y que empezaran a entrar mensajes en mi teléfono móvil. Más de cien personas me escribieron por WhatsApp para darme la enhorabuena, fue una locura. En redes sociales la respuesta también fue brutal. En Estados Unidos a veces estás lejos de todo, pero es emocionante ver que cuando ocurren cosas importantes hay tanta gente que se acuerda de ti, que te recuerda de dónde vienes. Ahora sólo tengo que centrarme en aprender de mis compañeros, adaptarme al nuevo equipo y pelear. En Chip Ganassi corres para ganar y es por eso que estamos aquí. Espero que todos nos divirtamos en 2021.

Jimmie Johnson, Scott Dixon y Marcus Ericsson, los compañeros que tendré en 2021

LA COLUMNA DE ALEX PALOU: TEMPORADA 2020 DE LA INDYCAR