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Mercedes y Ferrari han reiterado su compromiso de reducir el precio de sus unidades de potencia para garantizar la sostenibilidad en el modelo de negocio actual de la Fórmula 1. Después de que las escuderías independientes sufrieran para afrontar el coste aproximado de 32 millones de euros durante las dos primeras temporadas de actividad con los V6 Turbo, los fabricantes aceptaron las exigencias de la FIA y accedieron a cifrar en apenas 12 millones el gasto requerido para utilizar sus motores a partir del año 2018.

El accidente de Fernando Alonso en el Gran Premio de Australia esconde algunos detalles interesantes que han permanecido bajo el desconocimiento de la opinión pública durante las últimas cuatro semanas. Tras conocerse que el impacto de su MP4-31 se produjo a un régimen de 46 fuerzas G antes de agrietar la superficie del asiento, la publicación germana Auto Motor und Sport revela en exclusiva que la visera del piloto asturiano se abrió mientras realizaba varias vueltas de campana hasta golpear frontalmente contra el muro de la tercera curva.

Fernando Alonso se ha erigido recientemente como una de las voces más críticas con el rumbo que ha tomado la Fórmula 1 hacia la tecnología híbrida, la limitación del flujo de combustible y la mayor relevancia de la mentalidad del piloto sobre la exigencia física. No obstante, el ovetense ha reiterado en una entrevista exclusiva al diario AS que el cambio en la configuración del deporte sigue ofreciendo un "desafío" en su intento de conseguir buenos resultados sobre la pista.

Pirelli ha amenazado con dejar la Fórmula 1 si los organismos responsables del deporte no aprueban su programa de test para la próxima temporada 2017. La FIA y los equipos fijaron el pasado viernes un ambicioso calendario de pruebas que incluía jornadas extensivas de actividad con los neumáticos del próximo año, aunque la proveedora italiana exige cerrar un acuerdo lo antes posible para trabajar sobre la nueva base de desarrollo y evitar más retrasos que puedan comprometer el éxito de sus modificaciones en busca de más espectáculo.

Cuando un aficionado a la Fórmula 1 recurre a los anales de la historia para recordar aquellas carreras épicas que protagonizaban los pilotos de antaño, es frecuente encontrar que algunos de sus actores más relevantes nunca llegaron a convertirse siquiera en campeones del mundo. Gilles Villenueve y Stirling Moss son dos de los ejemplos más notorios de este enclave, pero también existen otras muchas personalidades cuyo inmenso talento apenas les permitió alzarse con una o dos coronas, como es el caso de Damon Hill, Nigel Mansell y más recientemente Fernando Alonso, anclado a sus dos títulos sin perspectivas ganadoras a corto plazo.

En el paddock del Circuito Internacional de Shanghái no cesan los elogios hacia la figura de Daniel Ricciardo tras su brillante actuación en el Gran Premio de China. El piloto australiano ha conseguido adelantar a Nico Rosberg en la salida y liderar la carrera durante cuatro vueltas, pero un pinchazo en la rueda trasera izquierda le ha obligado a remontar desde la 17º posición hasta cruzar la línea de meta a pocos segundos de su compañero de equipo, Daniil Kvyat.

Kimi Räikkönen y Sebastian Vettel han protagonizado uno de los episodios más polémicos del Gran Premio de China. En la salida, el piloto germano ha visto cómo Daniil Kvyat trataba de adelantarle por la parte izquierda cuando ambos sorteaban la primera curva del circuito, lo cual le ha obligado a realizar un ligero movimiento en el volante que ha terminado por causar un accidente contra su compañero de equipo.

Carlos Sainz ha firmado una de las mejores actuaciones de su trayectoria deportiva en la Fórmula 1 después de terminar noveno en el Gran Premio de China. Aunque la posición final no refleje su tremendo esfuerzo para cruzar la línea de meta dentro de la zona puntos, el piloto de Toro Rosso ha reconocido estar "muy contento" con su actuación en Shanghái después de mantener diferentes batallas contra Lewis Hamilton, Kimi Räikkönen y Daniel Ricciardo, todos ellos afincados en puestos más nobles de la clasificación final.

En sus casi diez años de actividad ininterrumpida en la Fórmula 1, Lewis Hamilton ha experimentado una notoria transformación tanto en el lado deportivo como personal. Aquel joven británico que pecaba de inmadurez durante sus inicios en McLaren ha dado paso a un personaje lleno de pasiones que adopta frecuentemente una postura reflexiva sobre su vida dentro y fuera de las carreras. Lewis aterrizó en el Gran Circo rodeado de elogios sobre su habilidad innata al volante, y aunque los resultados sobre la pista hayan ratificado la veracidad de esta etiqueta durante los últimos años, nadie en el paddock niega que parte de su éxito resida en una profunda radicalización de su personalidad.

La rueda de prensa oficial de la FIA ha tenido a Lewis Hamilton como el gran ausente después de sufrir una avería en su motor que le obligará a salir último en la parrilla de mañana. Su compañero de equipo, Nico Rosberg, ha registrado el mejor tiempo de la sesión clasificatoria por delante de Daniel Ricciardo, consagrado como la sorpresa del día en segunda posición, y Kimi Räikkönen, quien ha cometido un error en su última vuelta lanzada.

El equipo Red Bull está estudiando la posibilidad de probar su sistema de protección del cockpit durante el próximo Gran Premio de Rusia, según ha confirmado Christian Horner. La formación de las bebidas energéticas afirma haber ideado una solución más "elegante” que el concepto 'halo' de Ferrari, aunque la autorización oficial para su primera puesta en escena sobre el trazado de Sochi se producirá únicamente bajo el cumplimiento de los requisitos estipulados por la FIA.

Lewis Hamilton ha protagonizado la sorpresa en la sesión clasificatoria del Gran Premio de China después de que una avería en el motor Mercedes le haya impedido marcar una vuelta cronometrada durante la Q1. Las causas del problema aún están por definir, pero el británico se ha quejado de una pérdida de potencia desde los primeros compases de la sesión, circunstancia que le obligará a salir desde la última posición de la parrilla en la carrera de mañana.

El ambiente de negatividad, incertidumbre y frustración que ha imperado en el paddock de la Fórmula 1 respecto a su ineficiente gobernanza empieza a dar paso a nuevos acuerdos beneficiosos para su estructura a largo plazo. Aunque se sigan cerniendo dudas sobre la viabilidad operativa del deporte, el éxito del nuevo reglamento y su obsoleta estrategia de negocio, la FIA y los equipos han dado un paso hacia adelante esencial para construir un futuro más sostenible desde el punto de vista deportivo, y es que la publicación Motorsport.com revela que ya existe un acuerdo para que Pirelli organice varias jornadas de test antes de la próxima temporada 2017.

Las nubes negras que se cernían constantemente sobre el equipo McLaren durante el 2015 empiezan a vislumbrar pequeños destellos de Sol en el horizonte. El rendimiento del chasis es correcto, la unidad de potencia ha realizado importantes pasos hacia adelante y el ambiente en Woking ya no denota aquella sensación de impotencia por no ser capaces de traducir la genialidad operativa del proyecto en forma de buenos resultados sobre el asfalto. Si bien es cierto que el progreso del MP4-31 apenas es suficiente para soñar con una aspiración constante a la zona de puntos, los gestos de frustración han dado paso a otra nueva etapa aún escueta en materia de posiciones, pero firme en el objetivo de ganar el Campeonato del Mundo en el futuro.

Bernie Ecclestone ha desvelado que Mercedes ayudó a Ferrari para incrementar la emoción del Campeonato de 2016. La teoría de que la formación germana había decidido perjudicar sus propios intereses deportivos en favor de una batalla más abierta por las victorias formaba parte de los comentarios internos vertidos por algunas voces autorizadas del paddock, pero no ha sido hasta ahora cuando Ecclestone ha confirmado el 'pacto' entre las dos escuderías más poderosas de la parrilla con vistas a mejorar la situación de la Fórmula 1.