Carlos Sainz cumple un sueño en el Montecarlo: "He esperado esto toda mi vida"

Pensar en el Rally de Montecarlo es hacerlo en montañas nevadas, hielo en el asfalto, horquillas de asfalto en medio de una preciosa naturaleza mediterránea y mucho público fiel a una de las citas más míticas del Mundial. Hoy había que pensar también en la pelea entre Sébastien Ogier y Ott Tanak por la victoria final, pero ha habido un aliciente extra: Carlos Sainz, el piloto de Renault en Fórmula 1, se ha puesto al volante de uno de los nuevos Renault Mégane RS para vivir, de alguna manera, su debut oficial en rallies. El coche, equipado con neumáticos de invierno con clavos, entrega 300 caballos en su versión Trophy, procedentes de su motor 1.8 turboalimentado. 

Obviamente, el joven madrileño no ha disputado la prueba, pero sí ha pilotado en los dos últimos tramos de la misma, como parte de la caravana de vehículos oficiales VIP que acompañan al Coche Cero en el reconocimiento de los tramos antes de su disputa. Y en ese papel también se va ‘ligero’, sobre todo en los últimos kilómetros, lo de la llamada Power Stage, que puntúa extra para los primeros clasificados del tramo. Las primeras palabras de Carlos al bajar del coche resultan emocionantes: "He esperado toda mi vida para hacer esto, y ha sido una experiencia asombrosa".

“Ha sido muy especial, y Renault ha sido quien lo ha hecho realidad. Siempre había querido hacer un rally con copiloto, notas de tramo y a buen ritmo, ¡y me ha encantado! El coche era realmente bueno. Tenía diferentes modos de conducción y los he estado probando para sentirme cómodo del todo. Tenías el modo Race, el modo Sport y un poco de control de tracción que podías ajustar. La dirección es muy precisa y la suspensión es rígida para las secciones más reviradas, así que realmente me he divertido mucho. Ha sido una experiencia fantástica, ¡y bastante deslizante en algunos sitios para redondear la ‘experiencia Monte Carlo’ completa! Mi padre me dijo que me lo tomase con calma, pero me he divertido mucho. Muchas gracias a todo el mundo por la oportunidad”, ha dicho Carlos.

El copiloto Rodrigo Sanjuán ha asistido a Carlos en esta experiencia. Rodrigo trabaja habitualmente con Alberto Monarri en el campeonato de España de Rallies de Asfalto, y ha aceptado encantado subirse a esta experiencia tan evocadora y que recuerda al periplo de Carlos Sainz Sénior con la marca del rombo, con la que fue subcampeón de España de Rallies en 1985.

El propio Carlos, padre, ha tenido unas palabras para su hijo en este día tan especial: “Estoy muy contento de que Carlos haya probado el sabor de un rally tan legendario. Monte Carlo era, y todavía es, una carrera muy especial para todos los amantes del deporte del motor. Carlos ha pilotado coches de rally antes, pero recorrer las carreteras de este evento en particular es diferente. Le he dado un par de consejos, pero el más importante de ellos ha sido ‘disfruta’”.

Carlos gets strapped in to his Renault Megane R.S for his #RallyeMonteCarlo debut. He will be out on SS16 and SS17 in the mountains today pic.twitter.com/t7AbEEPdE5

— Renault Sport F1 (@RenaultSportF1) 28 de enero de 2018

Thanks @RenaultSport for making my dream come true! An amazing experience that i will always remember! Probably not the last one! pic.twitter.com/nGjwuLmgiD

— Carlos Sainz (@Carlossainz55) 29 de enero de 2018

DESEO CUMPLIDO, EN PARTE

Este debut en rallies no es fruto de la casualidad, ni es solamente una acción de marketing de Renault. Carlos ya nos dijo en una entrevista hace cuatro años que él quería correr un Dakar e incluso en rallies en algún momento de su vida. Cuando tiene tiempo libre, desgalga con un Mitsubishi Lancer en una finca de su familia y con los consejos de su padre, que ‘algo’ sabe de la materia. No es una actividad del agrado de su madre, aunque Reyes comprende que el impulso de la sangre es irrefrenable.

Afortunadamente para ella, tendrá mucho tiempo de ‘paz’ todavía, en tanto que competir en rallies está contraindicado en cualquier contrato de piloto de Fórmula 1, y el mismo Carlos ha explicado que no podría compaginar ambas actividades. Tristes sucesos como el accidente de Robert Kubica en el Rally Ronde di Andora de 2011 pesan demasiado en los contratos de los pilotos de Fórmula 1.

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