Kevin Magnussen descubre a su padre en pista: "Con los datos sabes qué tipo de piloto es"

Magnussen padre e hijo unieron fuerzas para correr las 24 Horas de Le Mans el año pasado con High Class Racing y su compatriota Anders Fjordback como tercer piloto.

Nunca tuvieron la oportunidad de correr juntos ni mirar la telemetría de cada uno, pero en 2021 llegó el momento y Kevin pudo descubrir el estilo de pilotaje de Jan.

"Es muy divertido que un padre y su hijo puedan pasar un fin de semana corriendo juntos en Le Mans, en un circuito icónico en el que le había visto correr durante muchos años. Fue una muy buena experiencia", ha explicado Magnussen en el podcast oficial de la Fórmula 1, Beyond The Grid.

"Fue muy interesante comparar los datos, conozco a mi padre muy bien como persona, como mi padre y le he admirado como piloto", ha añadido.

"Sin embargo, nunca había sabido muy bien qué clase de piloto era. Los dos salimos a pista con el mismo coche en la misma sesión y comparamos los datos de cada uno. Sólo con los datos puedes ver qué clase de piloto es una persona y fue muy divertido comparar la información de cada uno en el mismo coche, con los mismos neumáticos. Aprendí cuál es su estilo de pilotaje", ha insistido.

Kevin reconoce que fue más rápido que su padre en el Circuit de La Sarthe, pero esto se debe mayoritariamente a que rodaron en un coche al que estaba más acostumbrado. En caso de salir a pista con un GT, la cosa hubiese sido distinta.

"Mi padre no pilotaba coches con carga aerodinámica desde hace 20 años y yo era más rápido, pero es un gran piloto. Si hubiésemos corrido en GT, no hubiera sido capaz de ir tan rápido como él. Yo estaba más acostumbrado, ya había probado coches similares a los LMP2 en Estados Unidos y fue un privilegio correr con mi padre", ha indicado.

Durante el año que estuvo fuera de la Fórmula 1, Magnussen disfrutó mucho de sus experiencias en la IMSA, un entorno que siempre tuvo interés por conocer desde que acompañó a su padre cuando era pequeño. Competir en trazados icónicos estadounidenses fue una novedad para él y por una parte, un sueño cumplido.

"Disfruté mucho de mi experiencia en Estados Unidos, en circuitos como Daytona o Watkins Glen. Mi padre ha corrido en la IMSA y estuve con él en algunas carreras", ha recordado.

"Era algo que quería hacer, correr en esas pistas con esos coches era como un sueño hecho realidad. Me vinieron bonitas memorias de mi infancia, fue muy divertido, me encantó la experiencia, es como de la vieja escuela", ha comentado Kevin para cerrar.