La sensibilidad en la transición

Haas tiene un 2021 de transición por delante, en el que su principal meta es que sus dos pilotos cogan experiencia y lleguen bien preparados a 2022. Los norteamericanos tienen a dos debutantes en sus filas este año, y el equipo quiere trabajar al máximo para que consigan la confianza necesaria.

"Es complicado. Las palabras equivocadas quizá hagan que se equivoquen más. Nuestro mayor desafío es que nuestros pilotos tengan la confianza que necesitan. Hay que pensar que son chicos de 22 años, nuevos en Fórmula 1, tienen toda la presión sobre ellos mismos. No es fácil, sólo con tu cabeza, lidiar con ello", ha reconocido Steiner en palabras que publica el portal web estadounidense Motorsport.com.

Steiner recuerda que a Kevin Magnussen también le costó coger confianza con el coche cuando llegó al equipo en 2017. Además, el danés ya estuvo dos temporadas en Fórmula 1 antes de aterrizar en su estructura. Haas ayudó mucho a su expiloto en aquella época y eso es lo que quieren repetir ahora con sus dos hombres.

"Kevin, en su primer año, aunque ya corrió dos temporadas antes en Fórmula 1, también fue algo inseguro con el coche y le costó creer en sí mismo. Necesitó nuestra ayuda y supo muy pronto que estábamos ahí para cualquier cosa. Eso es lo que queremos hacer con Mick y Nikita, dejarles claro que somos los primeros que estamos ahí para ayudarles", ha añadido.

En lo que a Nikita Mazepin respecta, Steiner cree que ese fin de semana tan complicado en Baréin afectó mucho a su moral. En Imola, con el paso de los días, mejoró su nivel y pudo ver la bandera a cuadros por primera vez en Fórmula 1.

"Diría que su confianza quedó tocada cuando llegó. Corrieron en Baréin en unas circunstancias complicadas, tuvo algunos trompos y eso le hizo estar más inseguro. Mick por su parte, hizo un gran trabajo. Nikita ya dio un paso al frente en Imola, podemos ver que está progresando. Hablé con él durante el fin de semana, y estoy intentado ser su mejor mentor", ha expresado Steiner para finalizar.