La FIA elimina las bananas disuasorias de las curvas 9 y 10 de Austria

La Federación Internacional de Automovilismo ha quitado las bananas disuasorias de Red Bull Ring que tantos quebraderos de cabeza provocaron el año pasado, las de las dos últimas curvas. En su lugar, han colocado sensores para controlar que se respetan los límites de pista.

El año pasado Nico Hülkenberg rompió un alerón en la primera sesión de entrenamientos libres, los Mercedes destrozaron dos flaps en la segunda. Racing Point también se dejó un ala delantera en los pianos.

Así, este cambio sirve para eliminar una preocupación más para los equipos, que este año además deben cuidar especialmente los coches porque un campeonato tan condensado puede crear problemas logísticos de fabricación a los equipos, sobre todo si se producen muchos accidentes en pista.

El movimiento de la FIA responde precisamente a la preocupación de los equipos por la falta de repuestos. Estos escribieron directamente a la Federación para advertirles de las situaciones críticas en las que les podían colocar estos pianos.

La siguiente norma se aplica tanto a la Curva 9 como a la 10:

"Un tiempo conseguido en entrenamientos libres o en carrera por fuera de la pista o más allá de los pianos rojo y blanco a la salida de la Curva 9 será invalidado por los comisarios si es detectado por el sensor", informa el director de carrera de la FIA, Michael Masi, en una aclaración a los equipos.

"La tercera vez que el piloto corte por el piano rojo y blanco en la Curva 9 durante la carrera se le enseñará la bandera blanca y negra y se informará a los comisarios de cualquier otro recorte por su parte", ha añadido Masi para terminar.