Ecclestone no asistirá al funeral de Lauda: "No quiero verlo muerto"

La catedral St. Stephen de Viena acogerá, este miércoles, el funeral de Niki Lauda, que falleció el pasado 21 de mayo. Al austriaco se le enterrará vestido con un mono de Ferrari tras una misa de réquiem pública. Hasta mediodía aficionados de todo el mundo se podrán despedir del tricampeón de Fórmula 1, pues el ataúd se expondrá cerrado dentro de la catedral durante las primeras horas de la mañana.

Se espera que Toto Wolff pronuncie un discurso, como ya hizo durante el Gran Premio de Mónaco. Lewis Hamilton también ha confirmado su asistencia al funeral. El que no irá, sin embargo, será Bernie Ecclestone, que prefiere recordar a Niki en vida, según ha defendido.

"No quiero ver a Niki muerto. Para mí sigue vivo", ha comentado Ecclestone en declaraciones al diario alemán Bild.

La amistad entre Lauda y Ecclestone comenzó en los años 70. A finales de década Niki fichó por el equipo de Bernie, Brabham. De hecho, la mítica gorra de Lauda es roja por los colores de esa escudería. Los dos han compartido media vida juntos, sin embargo, esto no convence al británico para saltarse su política en el tema de los funerales, ya que es partidario de no asistir a estos.

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Bernie visitó a Niki por última vez a finales de abril, cuando Lauda estaba ingresado en una clínica de Suiza en un delicado estado de salud, casi un año después de su trasplante de pulmón. Por las condiciones en las que estaba entonces, se alegra de que dejara de sufrir y asegura que ha dejado este mundo con orgullo.

"Niki siempre tenía su propia opinión y eso es algo bastante único en la Fórmula 1. Le fui a visitar a Suiza y ya estaba muy débil. Me preocupó mucho. Ahora ya no sufre. Ha podido dejar este mundo con orgullo y eso es lo mejor para él", comentó Ecclestone hace unos días respecto a su pérdida.