COCHES

PRIMERA PRUEBA

Hyundai i30 Fastback N: sedán deportivo para el día a día

Mide 12 centímetros más que la carrocería de cinco puertas
Sólo está disponible en la versión N Performance de 275 caballos
Fusiona un diseño elegante con un comportamiento deportivo
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Rafael Alonso
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13 Mar 2019 - 12:31

Hace unos meses conocimos la elegante carrocería fastback del Hyundai i30, y más recientemente pusimos a prueba en circuito su versión más deportiva, el i30 N, con carrocería hatchback. Hoy fusionamos estas dos interpretaciones del compacto coreano y nos ponemos al volante del nuevo Hyundai i30 Fastback N, un sedán deportivo de 275 caballos casi sin competencia.

El Hyundai i30 Fastback llegó al mercado a principios de 2018 como una carrocería más elegante y madura del compacto coreano y, como comprobamos en su presentación en Valencia, su diseño coupé de cinco puertas y su maletero de mayor tamaño lo convierten en un modelo todavía más interesante que el i30 de cinco puertas, sin llegar a ofrecer la imagen aburguesada del i30 CrossWagon, el familiar. Ahora, el tercer integrante de la gama compacta coreana suma una versión N Performance de alto rendimiento y 275 caballos que incorpora un plus de deportividad.

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Como ya comentamos en nuestra prueba del Hyundai i30 Fastback, esta carrocería es 12 centímetros más larga que la variante de cinco puertas y, con 1.441 kilos, casi 100 kilos más pesado que el fastback de 140 caballos –12 kilos más que el hatchback–. Mide 4,45 metros de largo, 1,79 de ancho y 2,65 de alto, aunque mantiene su distancia entre ejes y es, por tanto, un centímetro más corto que un Audi S3 Sedán de 300 caballos, uno de sus pocos competidores por dimensiones y enfoque deportivo, puesto que un Skoda Octavia RS es notablemente más largo, y un Honda Civic Type R, mucho más potente.

En el apartado estético, incorpora el mismo frontal que el i30 N Performance que probamos en circuito, y se diferencia de las versiones menos potentes por una parrilla hexagonal en cascada con acabado negro y bordes cromados, un parachoques con mayores entradas de aire y un labio inferior en color rojo. Las carcasas de los retrovisores y las taloneras en negro marcan la diferencia en el lateral, mientras que las llantas de 19 pulgadas con neumáticos Pirelli P Zero de 235 milímetros y perfil 35, alojan unos discos de freno de 345 milímetros delante y 314 atrás con las pinzas de freno pintadas en rojo con el distintivo N.

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Los cambios en la zaga respecto a la carrocería corta son más notorios y, al margen de la evidente inclinación de la luneta y el alerón negro brillante integrado en el portón del maletero, se centran en un parachoques diferente que simula un difusor entre dos salidas de escape metálicas y una luz antiniebla de diseño triangular, invertida respecto a la luz de freno en el cinco puertas. Aquí, una banda roja también añade ese toque de deportividad.

Para la carrocería del i30 N, Hyundai ofrece cinco colores que son: blanco polar, gris Micron, negro Phantom, rojo Engine y azul Performance. Adicionalmente, el i30 Fastback N recibe un tono exclusivo gris 'Shadow' que dota a su imagen de un aspecto más elegante pero sin renunciar a la deportividad.

 

INTERIOR

El habitáculo del Hyundai i30 Fastback N también rezuma el mismo aroma de deportividad que su carrocería hermana. Los materiales y acabados en la parte superior del salpicadero son de buena presencia, y tanto el volante como el forro de la palanca de cambios son de cuero microperforado con pespuntes en rojo y el distintivo N. Al igual que en el i30 N Performance, el volante multifunción cuenta con dos selectores para cambiar entre los modos de conducción Normal, Eco y Sport, y acceder a los modos N y N Custom. Los asientos de cuero y Alcantara, y las molduras en rojo de las salidas laterales del aire acondicionado completan ese toque deportivo N Performance.

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En cuanto a la habitabilidad, los asientos delanteros son cómodos al tiempo que ofrecen una buena sujeción lateral. La regulación eléctrica de la altura, la profundidad y la inclinación de la banqueta permiten encontrar una posición de conducción óptima, y la banqueta extensible para conductor y acompañante es algo que agradecerán los pasajeros más altos o de piernas largas.

En las plazas traseras, como en la versión hatchback, el espacio es correcto para  adultos de hasta 1,85 metros de altura, pero la caída del techo en la parte posterior de esta carrocería resta algo de altura para la cabeza y dificultan ligeramente el acceso. El maletero, de 450 litros, gana 55 respecto a la carrocería corta del i30 pero, al igual que sucede en la versión más prestacional de éste, se ve interrumpido por la barra estabilizadora entre las torretas de suspensión posteriores. Así aunque se beneficia de contar con un portón grande que facilita la carga, el borde de éste queda elevado y, al abatir los respaldos traseros, la superficie de carga no resulta completamente aprovechable.

 

 

 

EQUIPAMIENTO

El Hyundai i30 Fastback N Performance sólo está disponible con un paquete de equipamiento que incluye de serie la pantalla táctil de ocho pulgadas, compatible con Android Auto y Apple CarPlay, y el navegador integrado. La pantalla puede mostrar datos de rendimiento del motor, un medidor de fuerzas G y un cronómetro de tiempo por vuelta. Además, a través de ella, es posible navegar por los distintos modos de conducción y configurar algunos parámetros a voluntad en el modo N Custom.

Así, podemos ajustar la respuesta del motor, el sistema de 'punta tacón' automático que iguala el régimen de giro del motor al reducir marcha, el diferencial de deslizamiento limitado, el sonido del escape, la dureza de la suspensión adaptativa, la asistencia de la dirección y la intervención del control de tracción.

 

 

También de serie, bajo los controles del climatizador bizona, equipa una superficie de carga inductiva para el teléfono móvil y varias tomas de USB y 12 voltios, además de volante y asientos delanteros calefactados. Adicionalmente, toda la gama i30 cuenta de serie con los sistemas de seguridad activa Hyundai SmartSense con control de crucero con sistema Stop&Go, detección de peatones con frenada de emergencia, mantenimiento de carril, luces de carretera automáticas, detector de fatiga y vehículos en ángulo muerto, sensores de aparcamiento delanteros y traseros y cámara de marcha atrás.

 

MOTOR

En el apartado mecánico, el Hyundai i30 Fastback N performance sólo está disponible en España con un motor de gasolina turbo 2.0 T-GDi de 275 caballos de potencia y 353 Newton metro de par, que puede entregar hasta 378 Newton metro de manera puntual gracias a la  función Overboost. En algunos mercados se comercializará también la versión de 250 caballos que ofrece el i30 N de cinco puertas, pero este nivel de potencia no llegará a nuestro país con la carrocería fastback.

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Al igual que sucede en el i30 N, su mecánica sólo está disponible con una caja de cambios manual de seis velocidades y un sistema de tracción delantera, pero nos confirman desde la marca que con la siguiente actualización estética del modelo llegará un motor de más potencia y una transmisión automática de doble embrague y ocho relaciones.

 

COMPORTAMIENTO

Al igual que en su hermano de carrocería corta, el i30N Fastback N se ha desarrollado entre el Centro de Pruebas de Hyundai en Nürburgring, Alemania, pero su puesta a punto se ha ultimado en carreteras de toda Europa para dar respuesta a las exigencias de los conductores del viejo continente, su principal mercado objetivo.

Así, el Hyundai i30 Fastback N cuenta con un sistema de suspensión adaptativa, el mismo que el i30 N de cinco puertas, que modifica la firmeza de ésta según el modo de conducción seleccionado. En este sentido, la suspensión del i30 N es, en general, más firme que confortable, aunque ello no la invalida para un uso cotidiano si se tiene cuidado al pasar sobre badenes o baches muy profundos. En cualquiera de los modos contiene muy bien los movimientos de la carrocería y dota al i30 Fastback N de mucha agilidad en curva. La dirección, es precisa y ofrece una gran confianza al girar, mientras que el diferencial electrónico de deslizamiento limitado corrige la posible pérdida de tracción en apoyo para llevarnos hacia el vértice.

A este buen comportamiento dinámico lo acompaña un motor de 275 caballos que parece no tener fin. Empuja fuerte desde 1.500 revoluciones por minuto y se estira hasta casi 5.000 pero, además, entre 2.000 y 4.500 encuentra ese extra de par que le ofrece el Overboost, una segunda patada del turbo cuando pisamos a fondo durante una aceleración. Con todo, el Hyundai i30 Fastback N acelera de 0 a 100 kilómetros/hora en 6,1 segundos –lo mismo que la versión de cinco puertas–, y alcanza una velocidad máxima limitada a 250 kilómetros/hora.

Pero no todo es pisar a fondo el acelerador y, para ser fieles a la esencia de los compactos deportivos, Hyundai equipa a sus i30 N con una caja de cambios manual que, si bien sus recorridos son menos cortos que en un Honda Civic o un Mazda3, resulta muy agradable de manejar tanto a ritmo sosegado como durante una conducción deportiva.

Para aportar un pequeño extra de diversión, especialmente en los modos de conducción Sport y N, los i30N equipan un sistema de escape que modifica su sonoridad según el modo de conducción elegido. Además, en estos modos de conducción, el sistema automático de punta-tacón 'rev-matching' revoluciona por sí mismo el motor durante las reducciones de marca para sincronizarlo con el régimen de giro de los neumáticos, lo que desemboca en unos petardeos muy pasionales del tubo de escape, aunque quizá lo conductores más puristas preferirán desconectar este sistema desde el botón a tal efecto en el volante.

 

 

Durante nuestra prueba de unos 120 kilómetros por carreteras de montaña y vías rápidas, a un ritmo ligero pero no deportivo, el consumo medio arrojado por el ordenador de abordo fue de 11,7 litros. Ésto es algo superior a los 8,3 litros a los 100 kilómetros que homologa en ciclo WLTP, pero dentro de lo razonable para un vehículo de 275 caballos y el tipo de conducción practicada en este recorrido.

 

PRECIO

El precio del Hyundai i30 Fastback N es de 39.250 euros, igual que el i30 N Performance de cinco puertas con idéntica potencia y equipamiento, aún cuando su coste de producción es algo superior. Sobre estos, la marca ofrece hasta 6.500 euros de descuento si se suman la campaña de lanzamiento, la bonificación por financiación y los 1.500 euros que la marca entrega a cambio de cualquier coche independientemente de su marca.

Para los interesados en los i30 e i30 Fastback pero que no requieran del extra de potencia que suponen sus versiones N y N Performance, Hyundai ha lanzado también un paquete de equipamiento N-Line y se puede configurar con las versiones 1.0 T-GDi y 1.4 T-GDi de 120 y 140 caballos. Estos paquetes tienes un sobrecoste de 690 y 1.950 euros, respectivamente, y, en la versión de 140 caballos mejora las suspensión y los frenos y se pueden asociar a la transmisión automática DCT.

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En definitiva, el Hyundai i30 Fastback N es un sedán compacto deportivo de aspecto muy trabajado; tiene muy pocos rivales directos y, entre ellos, ofrece la mejor relación precio-potencia. Las propuestas de la competencia son más grandes, mucho más potentes o notablemente más caras. Marca distancia con los hatchback deportivos por su particular propuesta sedán, pero con un portón de carga que lo aventaja sobre otros modelos de tres volúmenes. Así, probablemente encontrará a su principal enemigo en casa, donde terminará por 'robar' ventas a su hermano de cinco puertas. No en balde es la versión elegida para el Campeonato de España de Turismos de 2019.

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