Lo difícil de la cohabitación de MotoGP y F1 en Assen

Carlos Sainz, que es amigo y comparte patrocinador, Estrella Galicia, con varios pilotos del Mundial de Motociclismo, también hizo hincapié en ello. "Voy a advertirles a mis amigos de MotoGP que se encontrarán con un asfalto con mucho agarre, pero muy desigual, más desigual que en el pasado año".

Con todo esto, me han venido a la memoria que en Assen los pilotos de MotoGP se mostraron extremadamente contrarios a que 'la catedral del motoclismo' –aunque con su remodelación ha perdido algo de su carisma, o al menos a mí me lo parece– pueda albergar en un futuro muy próximo el Gran Premio de Holanda de F1.

Los pilotos recelan algo la remodelación que ello implicaría en la pista. Temen que sus escapatorias, ideales ahora para las motos, puedan ser menos seguras al adecuarse a la F1, pero sobre todo temen el asfalto. "Los F1, con su potencia, dejan el asfalto muy bacheado".

Es una suerte que sólo tres circuitos alberguen en la actualidad MotoGP y F1: Barcelona, Silverstone y Austin. Antes estaba Malasia, pero Sepang decidió renunciar a la F1. 

La prueba de lo que decimos, la tenemos en Barcelona y no por el asfalto, "porque mis amigos de Barcelona han hecho un gran trabajo y el asfalto es liso y uniforme", afirma Sainz. Pero la F1 quiso una chicane para evitar la tremenda velocidad de entrada a la recta de meta y las motos la boicotearon…. porque para sus trazadas, convertían en muy peligrosa la entrada a boxes. A raíz del mortal accidente de Luis Salom en la curva del Estadio, que inicia la bajada, esa que los F1 dejaron de usar por la chicane, les hizo pedir una chicane, pero los bordillos y posición de la F1 no les convenía y se realizó una segunda chicane, rápidamente abandonada. Al final, se mantuvo el trazado original para las moto,s pero ampliando la escapatoria, a costa de derribar una zona de la tribuna.

Me viene a la memoria ahora el circuito del ParcMotor de Castellolí, cerca de Igualada.  Mientras se construía la pista de velocidad –un 'miniNürburgring' con desniveles acongojantes–, Ángel Viladoms –que después sería presidente de la RFME– quería –o intentó al menos– que motos y coches giraran en sentidos distintos. Las razón era que así cada especialidad podía tener su propia escapatoria, conforme a sus necesidades. No es algo sencillo de conseguir, posiblemente bastante complicado, pero no descabellado.

Y es que la F1 quiere escapatorias asfaltadas. Las motos prefieren hierba o grava. Las motos frenan muy lejos porque tienen más punta y un paso por curva inferior y también menor capacidad de frenada.

No sé si en Assen se podrá poner en práctica algo de esto. Está claro que con el fenómeno Max Verstappen, Holanda quiere ya un Gran Premio. La marea naranja, que asalta los circuitos europeos, es tentación para cualquier promotor. Se pensó en recuperar Zandvoort, pero la opción está desestimada, es demasiado problemática la adaptación del trazado.

Pero el problema es algo que debe tenerse en cuenta en futuros circuitos y afrontarlo de manera que los aficionados no estén en 'casadios' y tengan que mirar la pista a través de prismáticos. Eso sí, se sigue pensando en circuitos permanentes, porque hay gente que defiende que los circuitos urbanos son más adecuados para la F1. Eso sí, estoy con los 'motards': Assen, que no me lo toquen más.

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