McLaren trabaja, pero Norris y Piastri deberán tener mucha paciencia

No se trata sólo de cambiar de responsables técnicos, algo que McLaren ha comenzado a hacer. James Key ha hecho las maletas, pero se está a la espera de que su sucesor, el ex de ferrari David Sánchez, pueda comenzar a trabajar con ellos, una vez superado el periodo de ‘carencia’ (https://soymotor.com/f1/noticias/reestructuracion-en-mclaren-james-key-deja-el-equipo-y-david-sanchez-vuelve).

Algunos de los problemas de los papaya ya los puso sobre el tapete Lando Norris en 2021, pero se mantienen pese al cambio de reglas. A ello quizás no sea totalmente ajeno el hecho de que McLaren no tiene túnel de viento propio en estos momentos. El que estaba en el interior de la factoría de Woking quedó obsoleto y se está trabajando en uno de los túneles de Toyota en Colonia. Eso cuesta dinero —algo importante con el ‘techo presupuestario— de una parte y resta agilidad y rapidez.

También se necesita un nuevo simulador, que, como el túnel de viento, debería estar listo este verano (https://soymotor.com/noticias/el-nuevo-tunel-de-viento-de-mclaren-para-mediados-de-2023-9101416) para comenzar el siempre delicado trabajo de su correcta calibración y la comparación de sus datos con los obtenidos en los instrumentos actuales.

En F1 no hay milagros, así que deberá pasar algún tiempo para comenzar a recoger sus frutos. Lando Norris y Oscar Piastri saben que difícilmente sus efectos se verán en 2024.

Por el momento, el problema clave está ahí: déficit de drag y déficit de downforce, una eficiencia aerodinámica pobre. Un pez que se muerde la cola: si cargas el coche, empeoras el drag; si favoreces la punta, se resiente la velocidad de peso por curva, tracción y frenada. Los ingenieros deben hacer muchos equilibrios con ambos factores.

Es cierto, son quintos del campeonato, como acabaron el pasado año. Pero hay una diferencia brutal. El pasado año se pelearon casi hasta el final con Alpine para ser ‘el mejor de los otros’ y dejaron claramente atrás al resto de perseguidores. Este año, siguen peleándose con Alpine, pero han perdido de vista a los de cabeza y, lo que es peor, los que eran considerados ‘parias’ les pisan los talones.

Y ahí esta Zak Brown a la expectativa. Consiguió enderezar el tiró tras la debacle de McLaren-Honda, llevó al equipo incluso a ser tercera fuerza, aunque a ello contribuyó un pésimo momento de Ferrari. Pero ahora, con el salto adelante dado por Aston Martin, hay muchos que se cuestionan cosas porque los de Woking no parecen capaces de hacer lo mismo.