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El rumbo ecológico que ha tomado la Fórmula 1 en 2014 no satisfará ahora a los aficionados más exigentes, pero incluso ellos no podrán negar que es el momento de que el deporte avance y tome la mano de las tecnologías que marcarán el futuro de la industria automovilística. Esa es la opinión del mandamás de McLaren, el inglés Ron Dennis.

Los equipos de Fórmula 1 no creen en la efectividad del techo presupuestario que la FIA ha anunciado para la próxima temporada, y así se lo han hecho saber en una carta que han hecho llegar a la Federación desde el paddock de Baréin.

Lewis Hamilton logró en Baréin su victoria número 24, con la que igualó el récord de Juan Manuel Fangio. El piloto británico explicó que no le resultó fácil retener tras él a su compañero de equipo, Nico Rosberg. Según reveló, tuvo un problema con el sistema de frenado. 

Antes de que los pilotos nos depararan una de las mejores carreras en años, lo único de lo que se hablaba en Baréin era de buscar soluciones para hacer de esta Fórmula 1 más atractiva. Las dos voces cantantes de la reivindicación fueron las de Montezemolo y Ecclestone, a los que no les gusta nada como está siendo la nueva competición. Pero el que manda, Jean Todt, dejó claro que no iban a cambiar las normas solo para frenar a Mercedes: "Cogerles es un reto para los equipos".

Luca Cordero di Montezemolo abandonó visiblemente impactado y enfadado el circuito de Sakhir antes que finalizara el Gran Premio. A la pregunta del porqué de esa actitud, el italiano afirmó que "creo que no hay mucho más que ver". 

Las desafortunadas palabras que Sebastian Vettel pronunció en Malasia sobre el ruido de estos Fórmula 1, ya saben su "este sonido es una mierda", siguen trayendo cola. El alemán no solo indignó a mandatarios como el presidente de la FIA Jean Todt, quien envió una carta a Sebastian para mostrarle su disgusto por esas declaraciones, sino también a más personalidades del paddock. Ron Dennis es una de ellas.

En las dos primeras carreras habíamos visto a Vettel y a Hamilton por delante de Ricciardo y Rosberg respectivamente, pero en Sakhir los papeles se han invertido. Mercedes sigue dominando, como reconoce el campeón de Red Bull, que cree que los W05 están en un "mundo diferente".

La carrera de Baréin ha sido espectacular para el espectador, pero no para Stefano Domenicali, que ha vivido en primera persona la caída de una Ferrari que no estuvo en condiciones de luchar en ningún momento.

Bernie Ecclestone sigue adelante con el cambio de sonido de la nueva era en la F1. El magnate británico señaló como fuente de un posible cambio el tubo de escape, ya que el sonido que escuchamos proviene de ellos.

Paddy Lowe ha insistido en que sus pilotos no ignorarons las órdenes de equipos, simplemente porque no hubo tales órdenes. Solamente se dirigió a Nico Rosberg y Lewis Hamilton para que se respetaran en pista y, así, poder "asegurar que nos llevábamos de vuelta a casa los dos coches".

Baréin deja a Ferrari con un sabor amargo. Fernando Alonso y Kimi Räikkönen sólo pudieron sumar tres puntos ayer en la carrera celebrada en Sakhir, donde los Mercedes volvieron a brillar con un dominio indiscutible. Por ello, en la Scudería probarán mañana y pasado algunas piezas nuevas para intentar dar ese paso adelante que les falta y, así, intentar plantar cara a las dos flechas plateadas.

La Fórmula 1 evoluaciona tecnológicamente, pero también tiene que adrentarse en la era digital según el jefe de equipo de Ferrari, Stefano Domenicali, quien cree que la máxima categoría del motor se está quedando en los boxes.

Hamilton primero, Rosberg segundo. Segundo doblete consecutivo de Mercedes AMG, que hoy ha confirmado el poderío de su W05 con un dominio pleno y absoluto de la carrera de Baréin, donde han terminado con más de 20 segundos de ventaja sobre la competencia.

Ferrari se va de Baréin con una sensación de profunda decepción, no sólo por la novena y décima posición en la que han terminado Fernando Alonso y Kimi Räikkonen, sino por la notable diferencia de prestaciones que ha demostrado acusar el F14T respecto a la competencia más directa. Inmerso en una crisis que frustra hasta al propio Montezemolo, la entidad de Maranello confía en optimizar los dos días de entrenamientos de la próxima semana con el fin de minimizar daños de cara al próximo GP de China.