Honda decide utilizar todos sus tokens desde Canadá hasta Bélgica

La formación de Woking estrenó en Barcelona varias mejoras aerodinámicas en el suelo y los alerones, aunque el ritmo del MP4-31 distó de ser suficientemente competitivo para soñar con una aspiración al podio antes del final del 2016. Pese a los pequeños avances, en McLaren sostienen la teoría de que solamente Mercedes y Red Bull cuentan con un chasis mejor en todo el Campeonato. De confirmarse esta hipótesis, tanto Alonso como Button aterrizarían en Mónaco como dos candidatos firmes a gobernar puestos importantes dentro de la Q3, un enclave donde sí ha demostrado defenderse el monoplaza británico en las últimas carreras.

A expensas de conocer el efecto en las mejoras del motor, y conscientes de que McLaren ha sido capaz de solventar los problemas más notorios en el anterior MP4-30, en Honda sienten que la línea continuista en el diseño del coche sigue sin favorecer el método de funcionamiento de su unidad de potencia. En este sentido, la marca japonesa diagnostica internamente una resistencia al aire excesiva en el MP4-31 que perjudica el 'modus operandi' de su turbocompresor, apenas modificado desde el 2015, comprometiendo así la dotación de caballos a final de recta.

"Solamente vamos bien en el primer tercio de la recta", explican los ingenieros a Auto Motor und Sport. Esta tendencia característica de la aerodinámica a comprometer la velocidad del coche a final de recta también ocurre bajo la batuta de Adrian Newey en Red Bull, cuyo monoplaza guarda características paradójicamente similares al de McLaren. El método más eficaz para solventar este déficit de potencia no es otro que gastar tokens y comprobar su efecto en diferentes circuitos del Calendario, tal y como plantea Honda de cara a las próximas siete citas de la temporada.

Empezando por el Gran Premio de Canadá, donde llegará la primera gran mejora envuelta en un cúmulo de esperanzas, McLaren-Honda dedicará sus esfuerzos a exprimir la potencia del motor hasta final del mes de agosto en Spa-Francorchamps, un trazado con altas exigencias de potencia donde Alonso y Button rodaron únicamente más rápidos que los insolventes coches de Manor en 2015. Con el objetivo de evitar nuevos fracasos, los ingenieros japoneses también buscarán mejorar el funcionamiento del motor de combustión y el turbocompresor antes de la cita de Monza, aún más crítica con las velocidades punta.

Desde el equipo mantienen la confianza en que la hoja de ruta trazada por Honda surgirá el efecto deseado desde el primer punto de partida en Canadá. "Para entonces, ya podremos tener más potencia eléctrica", apunta un ingeniero. De cara al 2017, Honda prepara un diseño radicalmente distinto en su unidad de potencia que apartará al turbo y el MGU-H de su posición original alrededor de la 'V' en el cilíndro. De esta forma, el futuro MP4-32 debería conceder un mayor espacio para que los ingenieros trabajen en la resolución de los problemas de fiabilidad, acelerando así su progresión en la parrilla hacia el objetivo de batir a Mercedes.