Hamilton quiso dejarlo en incidente de carrera y Verstappen insistió en su movimiento en frenada

La carrera estaba en un punto ‘caliente’ en la pelea por el podio. Max Verstappen –con neumáticos más frescos al parar más tarde– ya había intentado pasar a Lewis Hamilton en varias ocasiones, pero no terminaba de conseguirlo y se le acababan las vueltas.

Fue en la vuelta 63 cuando Max intentó aprovechar la presencia de un doblado para hacer un ‘dive bomb’ por el interior de la curva 1 y se tocaron bruscamente. Hamilton salió airoso de la maniobra y subió al podio, mientras que Verstappen cayó a la quinta posición.

La acción fue investigada a posteriori y, para sorpresa de muchos, no hubo sanción para Max Verstappen. Volvió a lanzarse con una de sus frenadas imposibles y bloqueó las ruedas antes de colisionar con su rival, pero el piloto de Red Bull parece tener ‘carta blanca’ en ese sentido.

Lo que no esperaba ver en el documento de la FIA es que Hamilton quiso ‘finiquitar’ el caso como incidente de carrera y fue Verstappen quien insistió en que el inglés se movió en frenada para intentar que le sancionasen.

"El piloto del coche 44 –Hamilton– declaró que se trató de un incidente de carrera, mientras que el piloto del coche 1 –Verstappen– argumentó que se trató de un caso de cambio de dirección en la frenada", señala el comunicado.

Pero los comisarios lo tenían ‘clarinete’. "Está claro que el coche 1 bloqueó las ruedas delanteras en su aproximación a la curva 1, antes de que se produjera cualquier impacto, pero perdiendo la trazada normal para una típica maniobra de adelantamiento".

También se señala en el documento que Max llegó a la curva con "más velocidad que en vueltas anteriores debido al DRS y frenó en el mismo punto". Hamilton, por su parte, siguió su "trazada de carrera normal", lo cual fue confirmado mediante la revisión de vídeos y telemetría.

Eso sí, los comisarios dieron parte de razón a Max al asegurar que, aunque no lo consideraron como un típico caso de movimiento en frenada, sí creen que Hamilton "podría haber hecho más para evitar la colisión".

Al final, la decisión fue ‘lavarse las manos’: "Ningún piloto fue el principal responsable y decidimos no tomar más medidas".

Es curioso. Otras veces, un ‘dive bomb’ con contacto incluido es sinónimo de sanción casi inmediata. Sin ir más lejos, en Austria sancionaron a Fernando Alonso por su toque con Guanyu Zhou... y a Nico Hülkenberg previamente –en el Sprint– por su maniobra con el español, en la que ni siquiera hubo toque. Cosas de la FIA.