Aston Martin huye de la 'depresión': "No debemos ser autodestructivos"

El equipo de Silverstone ya no da las mismas muestras de optimismo que a principios del año pasado. Fernando Alonso firmó siete podios en la 2023, lo que le hizo volver a sentirse competitivo, y alzó a Aston Martin a los titulares. Sin embargo, poco queda de ese gran rendimiento. Los equipos de la zona media –Williams, Alpine, Haas y RB– han dado pasos adelante en la dirección correcta, mientras que el equipo verde no ha podido encontrar el ritmo que esperaba en sus actualizaciones. 

La escudería no huye de su responsabilidad en ello. El propio jefe de equipo ha lamentado, en más de una ocasión, no poder ofrecerle a sus pilotos un coche más competitivo. Saben que el futuro que se plantea en el horizonte, con Adrian Newey a la cabeza y la mejora de las instalaciones –sobre todo con el nuevo túnel de viento– es alentador. Pero también quieren pensar en el ahora. Y, para eso, Mike Krack ha sido claro: sí, hay que reconocer los errores, pero también aprender de ellos. La clave está en no hundirse ante las adversidades. 

"Habría estado bien no pasar por los momentos difíciles que hemos tenido, pero la realidad es que es una experiencia de aprendizaje útil. Para ser sinceros, las fases como ésta sirven para algo y nos ayudan a comprenderlas", ha analizado en declaraciones para la propia web del equipo. 

"Tenemos que ser autocríticos, pero no autodestructivos. Deprimirse por la situación no nos lleva a ninguna parte... pero es duro. Mentiría si dijera que no lo es", ha señalado. 

El reto estaba claro: conseguir un monoplaza que pudiera ir actualizándose y ganar la carrera de las mejoras, la que se disputa desde la fábrica. Pero el objetivo, igual que pasó el año pasado, no ha terminado de cumplirse. 

"Ha sido nuestra temporada más dura porque no hemos cumplido nuestras propias expectativas. Nos propusimos el reto de crear un coche que pudiéramos desarrollar continuamente para competir con los cuatro mejores equipos, y no hemos estado a la altura de esas ambiciones. Tenemos que ser honestos al respecto", ha asegurado. 

"Tenemos que aceptar la situación, aprender todo lo que podamos de ella, entender los errores que hemos cometido y encontrar la mejor manera de seguir adelante", ha insistido. 

El 'problema', lógico cuando se trata de una competición –y más todavía con la exigencia de la Fórmula 1–, es que el resto de equipos han mejorado mucho su rendimiento. Han sido capaces de evolucionar, y eso ha comprimido mucho más la zona media. De momento, Aston Martin continúa en la quinta posición –la del mejor del 'resto', por detrás de McLaren, Ferrari, Red Bull y Mercedes, que han sabido mantener su ventaja a lo largo del curso–. Pero la lucha por los puntos –novena y décima plaza, sobre todo, dado el dominio de los cuatro primeros– se ha vuelto mucho más dura. 

"Creo que este año demuestra lo competitivo y complejo que es este deporte. No te presentas y arrasas. Este año la competición se ha apretado, las diferencias son increíblemente pequeñas. La clasificación de México fue un buen ejemplo: el coche se anima un poco y te catapulta al 'top 10' cuando esperabas la eliminación en la Q1, eres el gran ganador del fin de semana, pero te clasificas 18º y tu fin de semana se ve muy comprometido. A veces menos", ha hecho balance Krack.

"Creo que esto se ha normalizado. Es un deporte muy expuesto, es muy fácil pasar de cero a héroe y de nuevo a cero muy rápidamente. Hay que desarrollar una cierta capacidad de recuperación y no apegarse demasiado emocionalmente a una sola actuación. La manera de superarlo es trabajar duro, tomar buenas decisiones y aprender de los errores", ha puesto el foco en su situación actual.