Volkswagen se plantea adelantar el regreso del Golf eléctrico

El Trinity es la punta de lanza de la nueva generación de coches eléctricos de Volkswagen. Inicialmente estaba previsto para 2026, pero las últimas informaciones apuntan a que debutará en 2030.

El motivo de este retraso es la crisis que VW atraviesa en materia de software, una crisis que ya se ha cobrado al consejero delegado Herbert Diess y que ha obligado a descafeinar las previsiones para el futuro inmediato.

Como parte de este reajuste, ahora Volkswagen estaría sopesando la posibilidad de recuperar el Volkswagen e-Golf, que en su momento se descatalogó para dejar paso al Volkswagen ID.3 cuando empezó el despliegue eléctrico de la marca.

El e-Golf se vendió entre 2014 y 2020, y era esencialmente la versión completamente eléctrica de la séptima generación del Volkswagen Golf. La generación que ahora mismo está en el mercado, la octava, no tiene un equivalente eléctrico.

El consejero delegado de Volkswagen, Thomas Schäfer, dijo a principios de noviembre que “sería una locura dejar morir marcas icónicas como Golf y GTI”, y abrió la puerta a la posibilidad de crear un hipotético ID. Golf. Parecía que sus palabras se referían a la novena generación del Golf, pero puede que no haga falta esperar tanto.

El periódico alemán Handelsblatt publica que VW estaría estudiando seriamente la posibilidad de recuperar la nomenclatura Golf ante el fracaso del proyecto Trinity, que se ha retrasado cuatro años. Estaría construido sobre la plataforma MEB, la misma que los demás ID.

El Volkswagen e-Golf original tenía 136 caballos de potencia y 230 kilómetros de autonomía.