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Renault Mégane TC4: nacido para los track-days

Es una versión del coche del TCR pensada para quienes quieren saborear la adrenalina de los circuitos

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07 Oct 2020 - 12:48

Renault está presente en el TCR Europe a través de Vukovic Motorsport. Pero la colaboración va mucho más lejos que la presencia del Mégane TCR en este campeonato europeo, porque se extienda también en el ofrecimiento de un Renault Mégane TC4, un coche dedicado a los track-days

Hasta la fecha, sólo marcas de gran prestigio deportivo se han aventurado a ofrecer modelos track-day. Ferrari, Lamborghini, Aston Martin, McLaren, Koenigsegg y alguna otra han ofrecido a sus clientes más deportivos un automóvil que sólo pueden disfrutar en la pista, de forma privada o en competiciones para el restringido club de afortunados clientes de la marca.

Ahora, Renault, a través de Vukovic y Renault Sport, ha decidido ofrecer esta posibilidad a un precio que se aleja mucho de las siete cifras necesarias para estos modelos tan exclusivos. El Renault Mégane TC4 es la respuesta que ofrecen.

En el pasado, Renault Sport ha ofrecido vehículos muy deportivos, incluso versiones de circuito. Sobre el Clio RS ofreció los TC1 y TC2, mientras que sobre el Mégane ya realizó el TC3 a principios de este año. Y el TC4 es producto de este linaje, sobre la base de la nueva generación Mégane. De hecho, es una réplica del TCR en muchos aspectos, pero pensada para poder ser gestionada de forma más asequible que un vehículo de competición.

El aspecto es, desde luego, espectacular. Partiendo del Mégane IV RS, la transformación incorpora un kit completo de carrocería que mejora la aerodinámica del modelo aumentado de forma notable la carga aerodinámica. El motor es potenciado hasta 360 caballos gracias a un turbo de mayor tamaño, un nuevo escape y una gestión electrónica específica. Cambio robotizado de doble embrague. La refrigeración ha sido redimensionada para hacer frente a las nuevas exigencias del motor. Tiene suspensiones modificadas y regulables, vías más anchas, chasis reforzado. Y por supuesto frenos modificados, llantas OZ oro y neumáticos adecuados.

La idea es ofrecer unas sensaciones similares a las del TCR de competición, sin las exigencias de este. La idea es de ofrecer 30 ejemplares al público, a un precio razonable para disfrutar en los track-days y quizás en competiciones ‘amateurs’ que permiten competir a coches que no cumplen ninguna reglamentación deportiva oficial.

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