Hyundai no corrió en Nürburgring y puede retirarse del WTCR

La marca surcoreana anuncio la decisión de que sus equipos clientes no corriesen, pese a estar presentes, debido a divergencias técnicas con los promotores del Campeonato. Es una medida de presión y protesta clara que puede tener repercusiones en el futuro del certamen o en los programas deportivos futuros de la firma.

A Andrea Adamo, máximo responsable de Hyundai Motorsport, no le ha temblado la mano a la hora de tomar esta decisión. El directivo italiano ha demostrado sobradamente que no le duelen prendas al tomar decisiones polémicas si con ello defiende los intereses de la marca.

"Un principio vale más que un campeonato", ha señalado Adamo. Ya el año pasado Hyundai se mostró muy crítica con el Balance of Performance al entender que perjudicaba claramente al i30 N. Críticas que se reprodujeron en Zolder, la prueba inaugural de este campeonato, a la par que se mostraban absolutamente contrarios a la autorización de algunas exenciones a la ECU en ciertos coches, lo que Adamo considera inaceptable.

También ha pesado que los coches de Cyan Racing, los Lynk & Co, que parece que dominan el Campeonato en la actualidad, son a los ojos de Hyundai coches oficiales de la marca y no de un equipo cliente, como mandan las reglas.

"Hyundai Motorsport anuncia que sus equipos clientes no participarán en el WTCR en Alemania esta semana. Tenemos la sensación de que ni la marca ni los equipos de sus clientes reciben el mismo trato en la categoría que otros competidores y no se sienten bienvenidos"", señalaba la marca a través de un comunicado.

"Hyundai Motorsport mantiene su compromiso de demostrar las credenciales de alto rendimiento de sus vehículos de carreras en un escenario internacional, en categorías que reflejan la marca N de Hyundai", añadía.

Los equipos cliente de Hyundai, BRC Hyundai N LUKOIL Squadra Corse y Hyundai N Liqui Moly Racing Team se encontraban ya en Nürburgring cuando la marca tomó la decisión. Los pilotos de estos coches eran Gabriele Tarquini, Norbert Michelisz, Nicky Catsburg y Luca Engstler, quienes han perdido, igual que marca y equipos, buena parte de sus opciones al título.

La decisión llega a pesar de que Hyundai había recibido autorización para elevar la potencia de sus coches del 95% al 97,5% para esta carrera tras los resultados de Zolder. Con ello deja la prueba con sólo 16 coches en parrilla.

Los promotores del Campeonato se mostraron sorprendidos por la decisión de los surcoreanos –que lamentaron sus marcas rivales– y afirmaron que su misión "es ofrecer una competición justa para todos participantes, tanto del punto de vista deportivo como técnico y promocional, una plataforma en la que todos compitan en igualdad de condiciones" y manifestó su voluntad de un diálogo constructivo con los clientes de Hyundai, "pero nuestra prioridad inmediata es sacar adelante con éxito el evento de este fin de semana".

Por el contrario, la marca mantuvo sus coches-cliente en la prueba del TCR-Europe en Zolder, a la par que mantiene su participación oficial en las 24 Horas de Nürburgring.

Una retirada de Hyundai sería un golpe duro para el Campeonato, pero la firma está dispuesta a ello porque cree que en la actualidad sus clientes tienen vetado luchar por las mejoras plazas y esto es un problema a la hora de vender coches y también para la imagen de marca.

De todas formas, es difícil de explicar cómo una firma puede ordenar a sus clientes que no corran si no existen vínculos más fuertes.