Los equipos siguen preocupados por la falta de datos sobre el halo

Durante el pasado mes de julio, se anunció que sería obligatorio para todos los equipos montar el halo, sistema de protección de la cabeza del piloto, en sus coches de 2018, aunque todavía no tienen detalles oficiales de cómo construir un apéndice que puede cambiar radicalmente la aerodinámica y la estructura del coche.

Cada equipo fabricará su propio halo, aunque lo tendrá que hacer con información minuciosamente detallada por parte de la Federación, para que nadie pueda sacar ventaja de un objeto de seguridad. Eso sí, la FIA no ha descartado que se puedan montar apéndices aerodinámicos sobre el halo a gusto de cada equipo.

"Debemos tener el halo en el coche del año que viene y eso es un gran desafío. Es un tema importante porque cambia la construcción del chasis", ha asegurado el director técnico de Renault, Nick Chester, en declaraciones que publica la agencia de noticias GMM.

"La introducción del halo fue una decisión que se tomó tarde, comparado con los proyectos, pero al ser materia de seguridad, todo el mundo trabaja duro en ello. Debemos asegurarnos de que ajustamos al halo bien en el chasis y de que el chasis resista las fuerzas requeridas por las regulaciones. También desde un punto de vista aerodinámico, el halo afectará a la parte trasera y esto habrá que tenerlo en cuenta para diseñar el nuevo coche", ha agregado el jefe técnico de Ferrari, Mattia Binotto.