Vuelven los límites de pista: los monitorizados en Paul Ricard y cómo reincorporarse

Paul Ricard es uno de los circuitos que más libertad de arriesgar da a los pilotos. Gracias a sus inmensas escapatorias, el miedo a dañar el coche es mínimo y más aún en comparación a los dos últimos circuitos que ha visitado la Fórmula 1, Mónaco y Bakú.

El trazado francés será un buen destino para que los pilotos descubran los límites de sus monoplazas. Eso sí, el hecho de que los muros estén tan lejos obliga a la FIA a trabajar más aún en los límites de pista y desde mañana en los entrenamientos libres, habrá hasta tres puntos monitorizados.

El primero serán las curvas 1 y 2. En caso de que un piloto se vaya largo –con las cuatro ruedas fuera– en la segunda curva, deberá seguir el bolardo amarillo y pasar por los bloques señalizados para reincorporarse con total seguirdad al trazado. Eso sí, tanto en este punto como en los otros dos, sólo podrá reincorporarse cuando sea completamente seguro hacerlo.

En las curvas 3,4 y 5 sucederá lo mismo, ya que si algún piloto se salta por completo la curva 4, tendrá la obligación de pasar por el bolardo amarillo y el bloque situado antes de la 5. 

En la chicane posterior a la recta de Mistral –el punto de adelantamiento más claro del circuito– también estarán monitorizados los límites. Cualquier piloto que se vaya largo en la curva 8, es decir, la fuerte frenada tras la recta, deberá girar por los cuatro bloques situados en dicho punto.

En caso de que los pilotos no cumplan dichas normas hasta en tres ocasiones en carrera, independientemente del punto del circuito, se les advertirá con la bandera blanca y negra. Si lo vuelven a hacer por cuarta vez, se informará del incidente a comisarios y posteriormente, recibirán una sanción por ello.

Eso sí, en caso de que algún piloto haya sido forzado fuera de pista y no haya seguido las indicaciones, la FIA a priori no actuará y lo considerará un incidente de carrera.