Consejos para un viaje vacacional a salvo del coronavirus

Se trata de uno de los momentos más esperados del año y en esta temporada con más razones todavía, tras unos meses en que no hemos podido salir de casa. Por ello este año, para viajar, vale más que nunca la pena recordar los consejos de seguridad de cualquier desplazamiento, a los que añadir los propios para evitar el contagio.

COMPROBAR EL ESTADO DEL COCHE

Es el primer paso lógico de cualquier viaje: comprobar el estado de los neumáticos –dibujo, presiones, etc. – y que la rueda de repuesto, de tenerla, está en buenas condiciones. También hay que revisar el estado de los líquidos como el de frenos, el del aceite y el refrigerante con el coche siempre frío. Comprobar también visualmente el estado de los frenos y de los amortiguadores. Para éstos últimos puede hacerse una prueba al apoyar todo el peso delante y soltar de golpe. Si el coche solamente sube, sin rebotar, es casi seguro de que se encuentrar en buen estado. Tampoco se debe dejar de lado el buen funcionamiento de los faros y todas sus luces

Muy importante es el aire acondicionado, pues el calor incrementa fuertemente la sensación de fatiga. Lo mejor es que la temperatura interior ronde los 24 grados y que de vez en cuando se ventile el aire para evitar la sequedad en los ojos. En el interior también hay que comprobar el correcto funcionamiento de los cinturones de seguridad.

No te olvides tampoco de llevar la documentación en regla y dispositivos de seguridad como el chaleco reflectante o el triángulo. Son tareas sencillas que todo el mundo puede realizar en su casa y en un tiempo reducido. Todo ello cobra mayor importancia si el vehículo ha estado detenido todo este tiempo a raíz de la cuarentena.

DESINFECTAR EL INTERIOR

No es mala idea realizar la desinfección y esterilización del interior para evitar cualquier mal. Si tu coche además es compartido por gente como pueden ser compañeros de trabajo, amigos u otras personas, es algo realmente importante. Muchos talleres ofrecen un servicio de limpieza completo con desinfección con ozono, cuyo precio no supera los 20 euros.

PRACTICA UNA CONDUCCIÓN RELAJADA

No hay ninguna prisa por llegar, el sitio al que nos dirigimos permanecerá en sus lugar vayamos rápido o no, por lo que vale la pena levantar el pie del acelerador si además llevamos a toda la familia con nosotros.

Si se da el caso de que no se ha cogido el coche en todo este tiempo, es probable que se hayan perdido automatismos y velocidad de reacción, que no facultades. No hay que preocuparse, no se es el único y con los kilómetros se recupera esa confianza, tan solo hay que realizar una conducción defensiva, es decir, tener mucho más en cuenta los movimientos de los demás para anticiparse ante cualquier imprevisto.

Realiza paradas más frecuentes que antes para descansar e hidratarte, no sobrecargarte mentalmente y estar siempre en condiciones óptimas. En este sentido, es importante llevar ropa cómoda, pero también apta para conducir.

REALIZA UN TURISMO ''LENTO''

Si no has planificado ya las vacaciones, o te da lo mismo ir a un sitio o a otro con tal de desconectar y salir de tu ciudad, lo más recomendable es decantarse por el turismo ''lento''. Este turismo hace referencia al que se realiza a lugares poco concurridos en vez de a playas masificadas. Un ejemplo de ello podría ser un pueblo rural con actividades pluviales, bodegas o paseos por el bosque o la montaña. Se puede desconectar igualmente y se evitan los peligros de contagio derivados de lugares masificados.

Asimismo, es importante planificar la ruta de antemano y, si es posible, viajar cuando la carretera esté más liberada, es decir, a primerísima hora de la mañana o incluso de noche.

Imagen de Albarracín, en Teruel

PROTÉGETE A TI Y A TODOS

Finalmente, lo más recomendable es restringir cualquier desplazamiento al mínimo posible. No obstante, si decides viajar, recuerda que vayas a donde vayas encontrarás a gente, por ello no te olvides de llevar siempre contigo la mascarilla y usarla en cualquier lugar público. De la misma manera, procura que tu familia también la utilice, así como el asegurarse de que todos se lavan las manos con frecuencia. La salud de los tuyos y la de todos dependen de pequeños detalles como estos.