Sausset renuncia al Garaje 56 de Le Mans

Frédéric Sausset, que lo ocupó hace unos años, ha tenido que renunciar a ocupar otra vez este box, esta vez no como piloto sino como jefe de equipo. Desde que se convirtió en el primer tetrapléjico en competir y acabar las 24 Horas de Le Mans, Sausset se marcó como objetivo que otros pilotos pudieran reeditar su objetivo. Una meta más ambiciosa si cabe porque quería que los tres pilotos del equipo tuvieran alguna minusvalía física.

Han sido dos años de larga preparación, pero al final el expiloto de 500 centímetros cúbicos Takuma Aoki, el expiloto de cross Nigel Nailly y Snoussi Ben Moussa no estarán en la línea de salida. Sausset, con el alma encogida, ha tenido que tirar la toalla. Lo que no ha podido detener la movilidad restringida, lo ha hehco el coronavirus.

"Tras hablar largo y tendido con mis pilotos y también con mis patrocinadores, el resto de miembros del equipo, del ACO y las ELMS, así como los presidentes de la FIA y la federación francesa, así como otras personalidades que ha colaborado en este extraordinario proyecto de hacer competir por vez en la historia un equipo compuesto por pilotos con hándicap en las 24 Horas de Le Mans, me he visto obligado a tomar la difícil decisión de renunciar a participar en la prueba a causa de la terrible pandemia mundial causada por el coronavirus", comunica Sausset.

El confinamiento actual ha tenido un fuerte impacto en la preparación del equipo. "Nuestro programa ha sufrido un parón brutal", explica.

"Creo que nuestra preparación no sólo se ha retrasado, sino que se ha degradado y no podríamos presentarnos en condiciones óptimas a la prueba. Hemos estudiado las diversas situaciones que podrían presentarse frente a nosotros, las consecuencias humanas y financieras de esta pandemia y nos ha parecido más razonable renunciar a participar este año", añade.

Sausset, junto a la renuncia a su participación en 2020 ha enviado al ACO una carta de candidatura para ocupar el Garaje 56 el próximo año. No es un adiós, sino un hasta la vista; no es una renuncia, sino un retraso.