Rosberg: "Luchar contra Hamilton siempre fue difícil"

Todo empezó en la última carrera de la temporada 2016, donde Rosberg decidió retirarse justo antes de empezar la carrera. "Decidí retirarme en la parrilla del Gran Premio de Abu Dabi, antes de la carrera. Estaba intentando aplicar todas mis habilidades de meditación, pero no funcionaba nada. Lo que funcionó fue cuando me dije que sería mi última carrera. Fue como decir 'bien, vamos a disfrutar de la carrera, que será la última'. Esto dejó a un lado todo el estrés que tenía", revela en una entrevista con la revista F1 Racing.

Una carrera en la que se proclamó campeón del mundo de Fórmula 1 por primera y única vez ante un Hamilton que lo intentó todo para arrebatárselo. "Al terminar la carrera fue muy emocionante. Nunca había experimentado una sensación así en mi vida. Fue uno de los momentos más bonitos de mi vida. Fue muy intensa, pero no diría que fue agotadora. Luchar contra Lewis siempre fue difícil, porque es un gran piloto", destaca.

"He aprendido que es importante guiarme por mis instintos, porque creo que es un indicativo muy poderoso sobre lo que deberías hacer y sobre lo que quieres hacer. Durante más de 20 años, cada día he estado centrado en las carreras, todo estaba planeado, todo se centraba en ganar la próxima carrera. Una vida plenamente dedicada a las carreras. Ahora se terminó y toca adaptarse, pero es un período muy excitante", agrega.

LA VIDA FUERA DE LA FÓRMULA 1

Después de proclamarse campeón del mundo, Rosberg ha empezado una nueva vida en este primer año fuera de la competición, aunque admite que sigue disfrutando de las carreras desde fuera. "Es muy emocionante. Están pasando muchas cosas. Tengo muchas otras pasiones en mi vida. Veo las carreras porque me encantan y disfruto viéndolas. Pero también estoy muy interesado en cómo los coches toman un camino para cambiar el planeta, así que también disfruto desde el punto de vista empresarial", comenta. 

Pero, evidentemente, de lo que está más orgulloso Rosberg tras su retirada es que puede dedicar todo el tiempo del mundo a su familia y, en especial, a sus dos hijas. "Desde el punto de vista familiar, es un momento intenso porque ha nacido nuestra segunda hija, así que tiene prácticamente todo mi tiempo. Mis dos hijas y Vivian son ahora, probablemente, mis pilares. Estoy muy contento y encantado por tener la libertad que tengo en mi calendario ahora mismo. Por supuesto que fue increíble ser piloto de Fórmula 1, pero es una vida muy intensa. Ahora tengo un estilo de vida distinto, puedo ir donde quiera cuando quiera", relata.

El expiloto alemán, por eso, quiere seguir vinculado de alguna manera a la competición. En las últimas semanas, Rosberg se ha convertido en el nuevo mánager de Robert Kubica, que se prepara para un posible regreso a la Fórmula 1 en 2018. Pero no sólo eso, ya que Rosberg también estuvo presente en el Gran Premio de Japón como comentarista en Sky Sports.

Otra de las opciones que se barajaba para el futuro de Rosberg era la de embajador del equipo Mercedes, aunque por ahora lo ve algo lejano. "Es genial seguir formando parte de la familia Mercedes y del equipo, pero de momento no creo que ser embajador de Mercedes sea algo para mí. Hoy en día es algo que me lo tomo a nivel personal. Puedo ir a la playa si quiero y no me pagan por ello. Quiero estar allí porque es especial ver mi coche en una posición legendaria", concluye.

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