'Quick' Mick Schumacher sigue con sus clases de conducción

¿Un Schumacher aprendiendo a conducir? Eso suena raro, pero es algo por lo que todos tenemos que pasar. Porque un piloto de la Fórmula 3 conducir sabe. Y rápido. Pero su instructor es el típico hombre severo y estricto que te pide calma –en realidad el humorista Markus Stoll, conocido como Harry G. La calma la tendrá que tener él con #QuickMick.

Si en el primer vídeo, Mick aprendía a arrancar el coche, y a jugar con el pie derecho del acelerador mientras el profesor exigía calma ante la mirada brillante de Schumacher, ahora nos llega el segundo, y tiene como lección algo que nos encontramos todos los días. Las rotondas.

“Mira izquierda, mira derecha, retrovisor, despacio.” Las típicas instrucciones. Pero #QuickMick tiene los reflejos alerta para evitar un obstáculo en la rotonda. “Has tenido suerte… Sigue despacio a la máquina limpiadora”. Pero con una luz en el techo, en la mente de Mick es el Safety Car. “Sí, sí, el Safety Car”. ¡Pero es que lo conduce Bernd Maylander, piloto del coche de seguridad en la Fórmula 1!

Llega la tercera entrega de las prácticas de autoescuela de Mick Schumacher. En esta tercera lección, toca una de las cosas más complicadas para un novato: aparcar.

Observa bien tu entorno, coche a 90 grados, controla los retrovisores y hecho. Turno de Mick: “fácil”.

Acelerador. Acelerador. Primera, y adentro. Sin necesidad de tanta maniobra. Mick 3 – Profesor 0. ¿Siguente lección?

Cuarta sesión de prácticas al volante para Mick Schumacher a los mandos del Mercedes-AMG A 45 de la autoescuela. Y hoy toca un punto clave: el adelantamiento.

Explicarle a un piloto de F3 cómo adelantar tiene su punto de ironía, pero hay que hacerlo. Que si la distancia, que si la velocidad relativa, que si los retrovisores. Pero suena el móvil, se enredan en una conversación con el futbolista Mesut Ozil, y para cuando el instructor insiste en adelantar… bueno, mira lo que pasa.

Ni los pilotos se libran de estas cosas, ni de la cara de sorpresa.

Y finalmente, el día del examen. En el quinto vídeo de la serie, Mick se enfrenta al temido examen práctico. Esta vez, el más nervioso parece el profesor, que trata de ganarse al examinador como sea. "Un gran alumno... gracias a su gran profesor." "Mire, mire cómo coge el volante. ¡Como un profesional!." Incluso cuando Mick se mete en un pequeño lío, salta a defenderlo. Aunque la intimidad se le va de las manos con el serio examinador a fuerza de querer ganárselo, para regocijo de Mick y enfado del examinador. Nota: no preguntar nunca por la mujer del que examina.

El resultado es el esperado. ¿Cómo no iba a sacarse un Schumacher el carnet de conducir?. Mick se nos ha hecho mayor. Parece que fue ayer cuando era un pequeño que rara vez veíamos por el paddock de la F1 mientras su padre competía. Y mientras el profesor busca nuevo alumno –¡y todos le huyen!– Mick acaricia el Mercedes, saborea la satisfacción de saberse conductor, pero no puede dejar de lado su faceta de piloto. Lo lleva en la sangre. Casco puesto. El futuro está en sus manos.