Tost: "El trabajo comenzó tarde, pero soy optimista"

El jefe del equipo, Franz Tost, ha relatado como están preparando tanto desde la sede italiana como desde el túnel de viento de Reino Unido los monoplazas para la temporada que está a punto de comenzar.

"Tenemos a 480 personas trabajando en Toro Rosso ahora. Esto es porque tenemos tres turnos de trabajo para construir el coche, el trabajo comenzó tarde. En marzo vamos a reducir el número a 380, incluidos los que trabajan en el túnel de viento de Reino Unido", comenta en declaraciones a Autosprint.

Tost no tiene ninguna duda: estarán listos para la temporada 2016. "Sí, aunque me gustaría tener más tiempo, pero nuestro departamento técnico tiene muchos miembros del personal con experiencia que optimiza el tiempo que tenemos. Además, los test comienzan tarde este año comparado con 2015. Soy optimista", agrega.

Carlos Sainz será el primero en probar el nuevo monoplaza de Toro Rosso el día 22 de febrero en Barcelona. Por su parte, Max Verstappen será el último que se suba al nuevo coche el día 5 de marzo. Pero el equipo tiene un nuevo problema, que hará que el hermanamiento con Red Bull sea un poco más complicado durante este año. Mientras Red Bull llevará motores Renault renombrados Tag-Heuer, Toro Rosso será motorizado por Ferrari.

"Por desgracia, sí. Por ejemplo, antes trabajábamos juntos en el sistema hidráulico y ahora tenemos que hacerlo todo nosotros mismos. Nuestra cooperación será menos intensa", lamenta el jefe de Toro Rosso.

Además, Toro Rosso tendrá que encargarse de producirse su nueva caja de cambios. "Podremos usar la caja de Ferrari. Cuando estábamos buscando un nuevo proveedor de motores, el trabajo sobre la caja de cambios ya estaba en marcha. Vamos a ver cómo se desarrolla la situación. Si la caja de cambios de Ferrari es más fiable, práctica y barata, la utilizaremos", revela.

De cara al futuro, Tost espera poder tener una colaboración más estrecha con Red Bull, aunque también dejó caer la posibilidad de volver a ser motorizados por el mismo suministrador.

"Tal vez vamos a volver a usar los mismos motores, por razones económicas. En general, la estructura económica de los equipos de F1 no se corresponde con las tendencias actuales. Muchos de los fabricantes de automóviles más importantes están trabajando juntos y, sin embargo, en la Fórmula 1 se gastan el dinero en paralelo. Cada equipo hace sus propios detalles, tiene su propio túnel de viento. Gastamos enormes cantidades enormes de dinero que se podrían ahorrar mediante una mayor cooperación. No sólo eso, los coches estarían más ajustados y las carreras serían más interesantes", opina.

"Esta es la visión de Dietrich Mateschitz y, gracias a Dios, ha demostrado que es capaz de mirar a largo plazo. Pero hay equipos con ventaja técnica que se oponen a cualquier forma de cooperación. En cuanto a nosotros, la colaboración técnica con Red Bull es crucial para el futuro", añade.