Alex Palou: una rotura de motor que pone el campeonato al rojo vivo

Aun así, es importante tener presente que no es lo mismo perder 20 puntos porque tus rivales son mejores que tú que hacerlo porque has tenido una avería fortuita que te ha alejado del podio. Estamos muy fuertes como equipo y cada fin de semana damos un nuevo paso adelante, y eso lo siento en cada circuito y me da confianza para las cuatro pruebas que quedan en el calendario.

Hay que decir que, hasta la rotura de motor, la carrera había sido bastante buena. Adelantamos en pista a tres coches e incluso superé a O’Ward cerca del final, de modo que estaba por delante de todos mis rivales en el campeonato. Y me había guardado los neumáticos nuevos para el final, así que tenía el podio a tiro.

Pero no tenía que ser así. De repente y sin avisar apareció un problema en el motor. Simplemente perdí potencia y ahí supe que había terminado todo. Es una pena, porque en un abrir y cerrar de ojos pasas de tener unos 50 puntos de ventaja en el campeonato a quedarte con tan ‘sólo’ 21.

La carrera no fue ningún camino de rosas. Desde la primera vuelta noté que algo no iba como siempre. Cuando iba detrás de otros coches, podía notar que los demás eran más rápidos. No sabemos del todo qué ocurrió, pero el caso es que los mapas motor de salida y de clasificación, que son los más agresivos, no iban bien. Todos usamos el mismo mapa en la salida, por lo que estamos en igualdad de condiciones, pero, cuando lo puse, el coche no corrió y perdí una posición. Luego ya pasamos al mapa 3, que es el de carrera, que tiene algo menos de potencia, pero te permite ir ‘normal’.

Aun así, nos sobrepusimos a la situación y llevamos la carrera hacia dónde queríamos. Este desliz inicial pareció resolverse con el paso de las vueltas y pudimos desplegar una buena estrategia, reservándonos los neumáticos nuevos para el final. El podio era más que factible. De hecho, cuando el motor se rompió, iba cuarto y ya le había recuperado un buen trecho a Grosjean, al que habría podido atacar en un par de vueltas.

Una rotura siempre da rabia, pero, en esta situación, aún más. Sobre todo cuando es en una carrera que te has currado mucho, donde has hecho buenas paradas, has adelantado en pista… Te da rabia, pero es lo que hay. No había nada que yo pudiera hacer como piloto y el equipo tampoco podía hacer nada al respecto. Y Honda es la menos interesada en que pasen estas cosas, de modo que estamos todos en el mismo barco.

Es verdad que este año quizá somos los que hemos tenido menos suerte con los motores, porque ya se nos rompió uno en pretemporada y luego nos falló otro en el Carb Day de la Indy500. Ahora es muy probable que recibamos otra sanción –aún no es seguro al 100%, pero lo es al 99%– y si la cumplimos en Gateway serán nueve posiciones en vez de seis, porque es un oval.

Aun así, tengo muchas ganas de afrontar estas cuatro carreras que quedan. Al principio de la temporada éramos muy fuertes en algunas pistas y en otras sufríamos más, pero ahora creo que ya no es así. Somos competitivos en todas partes.

Estoy convencido de que podamos ir a Gateway y pelear por la carrera, incluso con la penalización. Si tenemos un coche como el de estas últimas carreras, remontar es factible. En un circuito normal sería difícil, pero en un oval puedes pasar a seis coches de golpe con la estrategia.

Yo personalmente me siento más cómodo. Mi punto fuerte todavía son los circuitos permanentes, pero en los ovales soy mucho más competitivo, sobre todo después de las 500 Millas de Indianápolis. Gateway fue uno de mis mejores ovales la temporada pasada, porque como llevamos carga aerodinámica y tenemos que frenar todavía tiene un cierto parecido con un circuito rutero. Y luego están los urbanos, que no son un problema cuando estamos en igualdad de condiciones –como Nashville, que era nuevo para todo el mundo–, pero aún son un reto en pistas como Long Beach, donde hay gente que lleva una década compitiendo y yo sólo tendré una sesión de entrenamientos libres.

El campeonato está muy bonito. Quiero traerlo a casa. Quedan cuatro carreras, empezando por la de este fin de semana.

LA COLUMNA DE ALEX PALOU: TEMPORADA 2021 DE INDYCAR