Rosberg gana el duelo a Hamilton y Ricciardo vence al resto del mundo
Aunque solo fueron los primeros pasos, hace apenas un mes pudimos comprobar en Baréin cómo de brillantes eran las estrellas de Mercedes. Con uno de sus coches, ya fuera oficial o cliente, cada día al frente de los tiempos invernales. Hoy, en el mismo escenario, envueltos en la magia de la noche del desierto y cuando había que dar la cara de verdad, los motores alemanes se han vuelto a lucir copando casi todas las posiciones de privilegio de la parrilla.