En Sauber todavía sueñan con retener a Hülkenberg junto a ellos
En la recta de meta llegaba a juntar tanto el alerón delantero con la parte de atrás de su coche que difícilmente entraba una mano en el hueco que había entre ambos, pero después, en el vértice de la de segunda curva, veía como el monoplaza que le precedía se aleja cada vez más y más siendo imposible darle caza a pesar de tener el DRS disponible. Después otra vuelta, y otra y otra… Ese fue el calvario que sufrió Alonso rodando detrás de Hülkenberg.