Marko carga contra el límite de propulsores: "Es algo absurdo"

"Está haciendo que nuestro trabajo sea imposible para prepararnos para la carrera de una forma profesional", señalaba amargamente ante la agencia austriaca APA en relación al reglamento de hoy en día.

La próxima semana, el Grupo de Estrategia se reunirá para debatir numerosas cuestiones entre las que se encuentran el número de motores asignados por monoplaza durante la temporada, decisión crucial para Red Bull debido a la paupérrima robustez que sus propulsores han demostrado.

Es algo absurdo, no reduce costes, al contrario. Nadie va a terminar con su cuarto motor

Cuatro es la cifra actual de propulsores que cada piloto puede usar libremente, y cinco es el número de ellos que se quiere conseguir sin incurrir en una penalización, algo que, según Marko, sigue sin ser suficiente de acuerdo con las necesidades de su equipo:

"Para nosotros no importa, necesitamos siete u ocho. Las regulación de larga vida de los motores son algo absurdo porque no reducen costes, al contrario. Nadie va a terminar la temporada con su cuarto motor".

Red Bull está viviendo horas bajas a causa de la falta de rendimiento y fiabilidad mostrada, tanto por el chasis, como por el motor Renault, plagado de fallos durante las primeras carreras que ha obligado al australiano a montar su cuarta unidad de potencia  ya en Montmeló, algo que ha obligado al motorista francés a dejar de lado la búsqueda de rendimiento para intentar solucionar los múltiples fallos mecánicos que están viviendo, decisión con la que Marko no está de acuerdo.

"Únicamente la fiabilidad no nos va a ayudar, estamos cayendo atrás. Lo que perdemos por el motor lo podemos compensar más o menos desarrollando el chasis. Pero, al final, preferimos ser terceros y que el motor se rompa a ser sextos u octavos", declaraba.

Solo la fiabilidad no nos va a ayudar. Preferimos ir terceros y romper a terminar sextos u octavos

Por otro lado, Marko ha pedido además un cambio en el reglamento de cara a 2017 con el objetivo de hacer que la Fórmula 1 atraiga a más aficionados y pueda abrir la lucha por la victoria.

"Espero que surja algo razonable en la reunión. Es importante, no solo para nosotros, sino para toda la Fórmula 1. Los índices de audiencia y de aficionados en las gradas están bajando; apenas hay nuevos patrocinadores".

"Nuestro jefe, Dietrich Mateschitz, ya ha señalado que necesitaremos replantear nuestro compromiso si no cambia nada. El sistema con la FIA, FOM y los equipos no funciona. No puedes preguntar a todo el mundo lo que quiere, debería haber un mecanismo independiente", concluía.