Los palitos chinos: todos se divierten al ver cómo Mercedes se tambalea

La Fórmula 1 podría casi compararse con el popular juego de los palitos chinos, aquel en el que cada jugador debe coger un palo de madera de un color sin mover ninguno de los otros sobre la mesa al hacerlo. La clave está en encontrar el equilibrio y hacer cambios sin que la estructura se vea afectada, todo un reto. Para eso es clave que haya estabilidad y cero distracciones.

Sin embargo, todas las familias pasan por baches y Mercedes no es una excepción. Como cada vez que un equipo sufre, sus rivales se toman licencias para opinar de la situación e intentar detectar los puntos débiles. Con los alemanes no sólo lo hace Red Bull, para intentar desanimar a las tropas alemanas, Mattia Binotto también se ha atrevido.

El jefe de Ferrari ha sido el último en acercarse a contemplar cómo Mercedes se tambalea, a disfrutar del espectáculo y de la oportunidad que se puede abrir el año que viene para un nuevo equipo. Binotto, que forma parte de un equipo en continua reestructuración desde hace años, apunta a que lo que puede fallar en Brackley es la falta de estabilidad que han tenido en los últimos tiempos.

"Antes de fijarse en los aspectos técnicos, y debe reconocerse que Red Bull ha hecho un gran trabajo, creo que es lo correcto señalar que Red Bull está cosechando resultados excelentes porque pueden contar con un equipo que ha estado estable durante muchos años", ha destacado Binotto en declaraciones que publica el portal web estadounidense Motorsport.com.

"A pesar de haber afrontado dificultades, a pesar de no haber ganado, han seguido construyendo un grupo para intentar mejorar su coche y lo que vemos ahora es el resultado de ese trabajo", ha añadido.

"Si, por otro lado, observamos a Mercedes, ya en el último año ha habido varios cambios internos significativos y algunos puestos quizás se han cambiado, además del hecho de que renovaron a un piloto en febrero. Creo que hay señales de distracción que han llevado a la situación actual", ha expresado el jefe de Ferrari para cerrar.