La academia de pilotos de Red Bull saca músculo en Alemania

La algarabía estaba más que justificada en los garajes de Red Bull y Toro Rosso durante la jornada de ayer. Los de Milton Keynes habían conseguido la segunda victoria del año, los de Faenza un podio que se ha hecho esperar durante casi once años y, para más inri, ambos certificaron un doble podio para Honda, algo que no ocurría desde 1992.

No obstante, quizás el más exultante de todos era Helmut Marko. La academia de jóvenes pilotos de Red Bull no ha pasado por sus mejores momentos durante los últimos años, pero ayer sus pupilos se encargaron de volver a relanzar su imagen.

Que la academia de la marca de bebidas energéticas estaba en horas bajas era una realidad. De hecho, ante la falta de pilotos para la escudería Toro Rosso, este año se han visto obligados a repescar por enésima vez a Daniil Kvyat y también a Alexander Albon, que tenía pie y medio en la Fórmula E de la mano de Nissan.

Tampoco fue una buena señal para la academia el hecho de verse obligados a fichar a un piloto proveniente de las américas como Patricio O'Ward –vigente campeón de la Indy Lights– y, prácticamente acto seguido, prescindir de los servicios del joven Dan Ticktum.

Sin embargo, ante las adversidades y en un alocado Gran Premio con unas condiciones delicadísimas en el asfalto de Hockenheim, hasta cinco pilotos que han pasado por las manos de Helmut Marko dieron un auténtico recital.

Max Verstappen se llevó una merecidísima victoria, pero no menos impresionantes fueron las remontadas de Sebastian Vettel y Daniil Kvyat. Carlos Sainz y Alexander Albon finalizaron quinto y sexto, respectivamente, con Lance Stroll como único inmiscuido entre ellos gracias a una estrategia muy arriesgada.

Es más, la demostración de poderío podría haber sido incluso mayor, si no fuera porque Pierre Gasly y Alexander Albon colisionaron entre sí durante los últimos compases de la carrera y el francés tuvo que decir adiós prematuramente a sus posibilidades de cuajar un buen resultado.

Muchos de estos 'mirlos' ya han volado, como Vettel hacia Ferrari o Sainz hacia McLaren, pero la formación y el desembolso realizado por Red Bull siempre estará ahí, y pese a que muchas veces esta academia es comparada con una trituradora, su altísima exigencia ha producido una gran cantidad de talentosos pilotos a lo largo de los últimos años.