Bernie Ecclestone se enfrenta a un juicio que puede cambiar su vida y quizá la de la F1. El mandamás del Gran Circo es acusado por un delito de soborno en pos de agilizar la venta de un porcentaje de las acciones de la FOM a un comprador de confianza, CVC Capital Partners.
Ha salido airoso de su contienda con Constantin Medien en los tribunales británicos, pero a Bernie Ecclestone todavía le queda por superar una piedra más en su camino. Tendrá que ir a Múnich en abril para asistir al juicio por el que se le acusa de sobornar al banquero alemán Gherard Gribkowsky en la compra de los derechos comerciales de la Fórmula 1 en 2007. Las vistas coincidirán con las primeras carreras de la temporada, pero eso no supondrá ningún problema para el británico.
Bernie Ecclestone se libró de una dura sanción en el juicio de Constantin Medien. A priori, todo apuntaba a una sentencia de 100 millones de euros para el británico, pero finalmente se salvó y ganó el juicio. No obstante, esta victoria no le ha salido del todo barata y tendrá que pagar 24 millones de euros.
Bernie Ecclestone espera que el juicio que tiene pendiente en Múnich por presunto soborno al exdirectivo del banco público Bayern LB, Gerhard Gribkowsky, no se celebre. "Apuesto a que no habrá juicio", dijo el viernes en una subasta benéfica en Londres.
El abogado de Bernie Ecclestone ha dicho recientemente que su cliente podría aprovechar una ley alemana para negociar un acuerdo económico y evitar así un juicio penal por el supuesto soborno al banquero Gerhard Gribkowsky. Sin embargo, el mandamás ha descartado esta posibilidad.
Por primera vez, el abogado de Bernie Ecclestone, Sven Thomas, dijo que es posible llegar a un acuerdo en la demanda contra el magante de la F1 por soborno. No obstante, insistió en que el británico se está preparando para la lucha en el juzgado. Un portavoz del tribunal de Múnich, que se encargará del caso en abril, confirmó al Daily Mail que un acuerdo es un resultado posible.
Bernie Ecclestone se ha salvado de una demanda por valor de 480 millones de euros después de que la justicia de Nueva York haya evitado llevar a juicio la denuncia que Bluewaters Communications puso contra el inglés el año pasado.
El magnate de la Formula 1, Bernie Ecclestone, a sus 83 años, dejaba anteayer su cargo en el Consejo de Administración de la FOM. La fiscalía le ha citado a finales del mes de abril por el caso Gribkowsky, acusado de soborno. De cualquier forma, el indomable inglés no abandonará su quehacer diario supervisando su emporio.
El juicio por el caso Gribkowsky que retumba constantemente en la cabeza de Ecclestone sigue su curso y, lejos de ir por el buen camino para Bernie, la salida del laberinto cada vez es más difícil de encontrar… A los 73 millones de euros (100 millones de dólares) que le reclama el grupo Constantin Medien, hay que sumarle otros 290 millones de euros que piensa pedirle el banco BayernLB por el mismo motivo, la compra infravalorada de sus acciones en la Fórmula 1.
Lleva casi 40 años como el capitán de barco de la Fórmula 1, seguir este deporte sin verle pasear por el paddock saludando a pilotos, autoridades y famosos sería algo a lo que tardaríamos en acostumbrarnos. Es difícil imaginar una Fórmula 1 sin Ecclestone, pero ese momento está cada vez más cerca de llegar. Los 83 años que cumplió el pasado octubre y el agotamiento del caso Gribkowsky que le ha llevado a los tribunales podrían llevar a Bernie a dejar su puesto.
Anthony y Lewis Hamilton, padre e hijo, terminaron por arreglar la situación entre ellos después de haber roto toda relación. No obstante, el piloto nunca dio a su padre el dinero que le prometió. Y es que Anthony reveló que su hijo no le pagó durante la etapa en que fue su representante en la Fórmula 1.
El juicio entre Anthony Hamilton y Paul di Resta se celebra esta semana y la polémica entre ambos sigue día tras día. Esta mañana anunciábamos la perdida de pruebas del padre de Lewis Hamilton, que se ha justificado diciendo que a veces es normal “desviar la verdad”.
Esta semana se está celebrando el juicio entre Anthony Hamilton, padre de Lewis Hamilton, y su excliente Paul di Resta, del que era mánager. Hamilton denunció que el escocés le despidió de manera improcedente en 2012. Sin embargo, el escocés afirma que su exrepresentante le engañó por un acuerdo multimillonario que implica una compañía de bebidas energéticas.
Baréin está en calma, la paz social ha vuelto. Ésta es la imagen que el régimen del adinerado país y la Fórmula 1 ofrecen al mundo año tras año con un Gran Premio que cumple su función, ser una cortina de humo para proyectar al exterior una sensación de serenidad que no se corresponde con la realidad de la sociedad bareiní.
Las audiencias en el Tribunal Superior de Londres por el Caso Gribkowsky siguen su curso. Ayer le volvió a tocar el turno a Donald Mackenzie, cofundador de CVC Capital Partners, los propietarios de la Fórmula 1. El británico ya dejó claro a comienzos de la semana que si se demostrase que Ecclestone hizo alguna cosa ilegal sería automáticamente despedido, pero ha querido dejar claro que no tomarán ninguna decisión hasta que se conozca la sentencia del juez.
Adrian Newey, junto a su representante, Eddie Jordan, tomará una decisión sobre su futuro la próxima semana. El diseñador británico no tardará en elegir cuál será su nuevo destino en la Fórmula 1 y a la lista de opciones, se ha sumado Mercedes, con una oferta suculenta, que incluye acciones del equipo, según la última información procedente de Alemania.
Peugeot lanza el nuevo 3008, su modelo clave, con una oferta estratégica y un objetivo claro: que la movilidad eléctrica llegue a las familias.
Hyundai 'se pasa el juego' con un nuevo deportivo con dos motores y altísima potencia que hace derrapes, simula la conducción de combustión y es muy rápido dentro y fuera del circuito.
Lewis Hamilton ha revelado una de las grandes aficiones de Roscoe, cuando está de visita en el paddock de la Fórmula 1. El británico sostiene que a su perro le gusta hacer caca en frente de los motorhomes de otros pilotos, especialmente, en el de Fernando Alonso y George Russell.
