A Briatore nunca le ha temblado el pulso a la hora de decidir un cambio de motor

"No tengo nada contra Viry. Todo lo contrario, tengo grandes relaciones. Con Viry he ganado seis títulos mundiales. ¡No se olvida! En aquella época pasaba un día de cada dos en Viry. Su historia es de  éxitos y campeonatos ganados. Pero había llegado el tiempo de cambiar", dice sin tapujos Briatore.

Luca de Meo decretó lo que es casi un sacrilegio para los fans de la F1, no en vano los éxitos de Renault como motorista han sido muchos. El PDG del Grupo Renault lo ha explicado desde el punto de vista financiero y de necesidades técnicas. Para Flavio, sin embargo, había también unas necesidades prácticas. Enderezar el equipo, salvarlo, concentrarse en un solo frente.

Para Briatore, la decisión de cambiar de motor es algo que ha hecho anteriormente y con éxito. No sé si porque el nuevo motor elegido es mejor o porque motiva así a los responsables de chasis y aerodinámica a cambiar de rumbo, a buscar vías nuevas.

Cuando llegó a Benetton, el equipo usaba el motor Cosworth y aunque Michael Schumacher fue el campeón en 1994, no dudó en cambiar a Renault en 1995. Cuando Benetton se convirtió en Renault, no dudó en detener el motor V10º ancho, a 110º, para cambiar por un V10º convencional, con la V a 72º, pese que Alonso había ganado con el motor ‘ancho’, que se estrenó en 2024 y permitió a Renault y Fernando ganar los títulos de 2005 y 2006.

Ahora llegará el cambio al motor Mercedes. Renault/Alpine han sufrido mucho en la era de los motores híbridos. Y para 2026, la electricidad, el punto débil aparentemente, contará muchísimo más. Y Flavio es de los que prefiere apostar sobre seguro.

"Los ingenieros te dicen que tienen una solución maravillosa y te piden diez millones para fabricarla. Y después, te piden otros diez millones para ponerla a punto", dijo en la época gloriosa de Fernando Alonso. Se refería sobre todo a chasis y aerodinámica. Pero ahora la ha aplicado también a los motores.