Así llegan los equipos a Canadá

Esta pista tiene dos características principales, ambas ligadas. Es un circuito de rectas interminables, con unas frenadas muy bruscas. Así pues, baja, muy baja carga aerodinámica, motor al límite en cuanto a consumo y frenos sufriendo mucho.

Muchos equipos han traído alerones específicos para esta carrera, con configuraciones muy simplificadas, con el objetivo de reducir el drag. Es notorio el caso de Lotus y su alerón trasero, que será muy parecido al que veamos en Monza, muy reducido, casi plano. 

La solución de Ferrari en este aspecto ha sido cortar por lo sano, literalmente, pues parece que el alerón trasero ha sido recortado en altura. Ferrari ha traído un paquete muy interesante para esta carrera, lo repasaré al final.

Red Bull, por ejemplo, ha optado por quitar el bulbo de su morro, reduciendo esa resistencia a costa de sacrificar un poco de carga. En caso de McLaren, han retirado la mitad de sus suspensiones mariposa, seta, o como queráis llamarlas, de la trasera, generan una resistencia intolerable en este circuito.

Dicho esto, imaginaos la inmensa ventaja de los Mercedes, que han traído un monkey seat más elaborado para esta carrera, que ya se vio en Mónaco y que busca más carga aerodinámica. Van por libre realmente.

Y bueno, llegamos al paquete de actualización del Ferrari. Realmente muchos cambios han sido introducidos en esta carrera, un poco con el objetivo de llevar el coche al límite, pues parece que se dejaban bastante margen de fiabilidad. 

La principal novedad es el cambio de la tapa motor, que se alarga hasta detrás de las suspensiones, parecida a la del Red Bull en su sección final. Alargar la carrocería es una práctica muy extendida, por ejemplo en Le Mans, para reducir la resistencia. 

También está más ceñida al escape. Para conseguir esto, han cambiado la curvatura de la superficie, con lo cual el comportamiento del aire en la zona es completamente distinto. Lo vemos mejor en la siguiente ilustración:

La superficie gris es la que teníamos hasta ahora, la azul, la extensión que se ha realizado, prácticamente recta. De ahí la necesidad de una superficie de adaptación, en rosa, que cambia la curvatura del conjunto. 

Visto esto y los primeros test, diría que los Ferrari van a estar fuertes junto con los Williams. No quiere decir que vayan a toser a los Mercedes, por supuesto. Claro, esto es la teoría. Si tuviera dotes adivinatorias, ya habría ganado la quiniela un par de veces y ahora mismo probablemente estaría en Canadá.