La semana que vivimos 'peligrosamente': ridícula desigualdad
Y es que a pesar del tan cacareado cambio normativo, uno que antes de iniciarse la pretemporada se anunciaba como revolucionario respecto a igualar en lo posible las prestaciones entre las escuderías, una vez puestos los bólidos sobre el asfalto, ha quedado en nada, pues todo sigue en manos de los mismos, igual que antaño.