Sainz, cerca de la victoria pese a dos pinchazos: "Un buen día para Audi"

Se trataba de una etapa larga y dura, quizás el penúltimo gran escollo de este Dakar. Con una especial de 395 kilómetros –y más de 400 kilómetros de enlace– entre Al Dawadimi y Wadi Ad Dawasir que tenía una buena cuota de dunas en sus entrañas, pilotos y copilotos se enfrentaban, junto a sus monturas, a una jornada complicada.

Para sorpresa de muchos, los Audi han comenzado como cohetes: triplete provisional en el primer punto de control, con Mattias Ekström en el liderato y sus compañeros a su estela. Desde esta cabecera avisamos ayer del potencial del Audi RS Q e-tron de cara al futuro y que ya se empezaría a ver en esta segunda semana del Rally Dakar.

Tras un inicio dominado por Ekström, sería Stéphane Peterhansel quien cogería después las riendas de la especial, pero el piloto sueco, que no se ha encontrado del todo cómodo en las dunas, volvería a la carga en la sección final y se llevaría su primera victoria.

Carlos Sainz ha estado en todo momento en la pelea por ese triunfo –se ha quedado finalmente a sólo 3’11’’ del vencedor–, pero dos pinchazos han lastrado su actuación; en cuanto a navegación y mecánica, todo ha ido muy bien. Carlos estaba contento por sus compañeros y también por el ritmo mostrado.

"En primer lugar, ha sido un día muy bueno para Audi: primera victoria de Mattias y segundo puesto para Stéphane; a punto de hacer triplete, pero me he quedado a tres segundos del tercer puesto", ha comentado Carlos Sainz tras la octava etapa.

"En general, estoy muy contento, porque he tenido dos pinchazos lentos y he tenido que parar dos veces. Contento con el coche, con el ritmo y con todo", ha agregado.

"Considerando los problemas, creo que la velocidad ha sido buena y estoy contento con esta especial. Ésta ha sido una especial apropiada para el Dakar y muy bonita, la he disfrutado mucho. No hemos tenido ningún problema con la navegación, pero esos pinchazos han sido una pena", ha expresado Carlos para concluir.