Rally Suecia 2019: ¿Regreso al pasado?

A los Ogier, Neuville, Tänak, Latvala, Meeke… en esta ocasión se unirán dos pilotos de mucho pedigrí en el WRC: Sébastien Loeb, que rubricó su regreso al certamen a tiempo parcial con Hyundai, y Marcus Grönholm, que celebrará su 51 cumpleaños con una aparición esporádica a los mandos de un Toyota Yaris WRC.

En esta especie de 'regreso al pasado' también aparecen otros apellidos ilustres de la competición, como el de Kalle Rovanperä, hijo de Harri –ganador del Rally de Suecia 2001– o el de Tommi Mäkinen, tetracampeón del mundo con Mitsubishi y múltiple vencedor en tierras nórdicas, aunque éste verá los toros desde la barrera.

© Julian Porter

En cuanto al recorrido, el Rally de Suecia consta de 19 tramos repartidos entre cuatro días de competición. La totalidad del itinerario suma 1.460,59 kilómetros, de los cuales 316,80 kilómetros serán cronometrados, y el parque de asistencia volverá a estar situado en el aeródromo de Torsby.

La primera toma de contacto llegará el jueves por la mañana con un Shakedown de casi siete kilómetros, mientras la acción real comenzará con el habitual tramo inaugural en el hipódromo de Karlstad, donde Thierry Neuville se dejó sus opciones de victoria en 2017 debido a un impacto con las barreras.

El viernes, como viene siendo habitual en años anteriores, el recorrido pasará durante buena parte de la jornada por Noruega. Los pilotos deberán afrontar dos pasadas por las especiales de Hof Finnskog, Svullrya y Röjden –esta última transcurre por la frontera entre Noruega y Suecia– para más tarde superar por primera vez el tramo de Torsby, asignado como Power Stage para el domingo.

© Tapio Lehtonen

De cara a la etapa del sábado, otros ocho tramos harán las delicias de los aficionados, esta vez con las clásicas pistas suecas cercanas a Hagfors. Dos pasadas por Rämmen, Hagfors y Vargåsen –con su archiconocido Colin’s Crest–, además de otras dos súper especiales en Karlstad y Torsby Sprint, serán las protagonistas de la jornada.

Y como colofón al rally invernal, en la etapa definitiva los pilotos tendrán que sortear las trampas de Likenäs por partida doble, junto a la especial de Torsby que ya conocerán del viernes. Esta última fungirá como Power Stage y otorgará puntos extra a los cinco pilotos más rápidos.

El itinerario es muy parecido al del año pasado, pues sólo hay unos 50 kilómetros nuevos respecto a 2018 –un 15% del recorrido–, comprendidos entre los tramos de Röjden y el de Rämmen –el único que es completamente nuevo–, así que la experiencia será un componente vital para las aspiraciones de cada uno.

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Pese a ser un rally cubierto de nieve, es asimismo uno de los más rápidos de la temporada. La velocidad media que alcanzan estos nuevos vehículos entre los bosques nórdicos es endiablada, y para ello es necesario tener los 'zapatos' correctos. No en vano, cada equipo dispondrá de hasta 24 unidades de neumáticos con clavos, muy diferentes a los de Montecarlo –en Suecia se utilizan clavos de dos centímetros que sobresalen de la goma unos siete milímetros–.

Sin duda, se trata de uno de los rallies más vistosos de la temporada, con los pilotos haciendo uso de los bancos de nieve como soporte para ir más rápido. Otro de los factores a tener siempre en cuenta aquí es el orden de salida, sobre todo cuando hay buenas cantidades de nieve fresca, por lo que habrá que vigilar especialmente a los que no barren la pista el viernes.

¿Habrá mucha nieve este año? Siempre es uno de los temas más comentados, pero según la información que llega desde Suecia, en las segundas pasadas por los tramos podría aparecer la tierra. "Tendremos que ver cómo evolucionan las especiales en las segundas pasadas, pero me temo que con la capa de hielo que hay actualmente en las pistas, la tierra empezará a aparecer bastante rápido", comenta Sébastien Ogier.

© Rally Suecia

Volviendo a los apellidos ilustres de este deporte, no sólo tendremos en pista a Grönholm o Loeb, sino que Johan Kristoffersson competirá en la categoría WRC2 con un Volkswagen Polo GTI R5, además de Henning Solberg con un Skoda Fabia R5 y el Campeón Júnior del año pasado, Emil Bergkvist, con un Ford Fiesta R5.

También se dará el pistoletazo de salida al Mundial Júnior de este año, que además estrena coche. M-Sport proporcionará un vehículo completamente nuevo –sobre la base del nuevo Ford Fiesta– a los participantes de esta categoría, entre los que se encuentra Jan Solans con el Rallye Team Spain, que quiere seguir los pasos de su hermano Nil.