Peugeot nació en 1810. ¿A qué se dedicaba antes de los coches?

Los orígenes de la Peugeot actual se remontan a Jean-Pierre Peugeot, nacido en 1734, que a lo largo de su vida participó en la industria textil y regentó un molino de aceite y otro de grano. Sus hijos vieron potencial en el segundo y supo transformarlo para satisfacer su visión de futuro.

Los dos hermanos Peugeot, Jean-Pierre II y Jean-Frédéric, constituyeron la sociedad Peugeot Frères el 26 de septiembre de 1810. Y transformaron el viejo molino de grano en una fundición de acero, trabajando este material en múltiples formas a lo largo de los años.

A lo largo del siglo XVIII, Peugeot Frères fabricó utensilios como molinoos de café y de pimienta. Y también entró en el campo de los vehículos de la mano de las bicicletas, a las que accedieron a partir de la experiencia acumulada trabajando y moldeando el acero de los armadores de los vestidos de las mujeres acomodadas de la época.

Con un pie en el campo de la movilidad, era sólo cuestión tiempo que Armand Peugeot, nieto de Jean-Pierre, sintiera curiosidad por el incipiente automóvil. El primer vehículo de la marca se produjo en 1889, aunque en aquel entonces era un coche de vapor. En 1990, se produjo la transición a la combustión.

Claro que aún fue necesario esperar unos años antes de descubrir el primer coche producido en serie, el Peugeot 201, que nació en 1929 y dio lugar a la nomenclatura que ha perdurado hasta nuestros días. El Peugeot 301 se presentó en 1931 y en 1934 llegaron el 401 y el 601.

EL LEÓN, UNA HISTORIA QUE SE REMONTA A 1847

El actual emblema de Peugeot se remonta al año 1847, cuando la sociedad Peugeot Frères aún centraba su actividad en la metalurgia. De ahí que eligieran un emblema como el león, que simbolizaba la fortaleza de sus productos. Lo registraron en 1858 y lo han incluido en sus vehículos desde 1948.

Emblema conmemorativo del 210º aniversario, basado en el diseño original