Palou, preparado para afrontar su primera vez en un oval

La segunda tanda de test de la Indycar 2020 se desarrollará hoy en Fort Worth, el rapidísimo oval de Texas, donde Fernando Alonso hizo sus test previos a Indianápolis el año pasado.

Será una experiencia absolutamente diferente a la de Austin. Casi sin tiempo para digerirla, le llega este segundo envite. El piloto catalán colocó su Dallara-Honda del Dale Coyne Racing con el equipo Goh en el noveno lugar de la tabla de tiempos de Austin, un circuito rutero, es decir, tradicional, como los que siempre ha participado. Pero Texas es un oval de alta velocidad, donde se superan los 350 kilómetros/hora de media y éste es un examen clave de cara a las 500 Millas de Indianápolis.

"Creo ha sido un buen test el del COTA. Fue una pena que la mala meteorología impidiera rodar el martes porque tengo muchas cosas que aprender todavía. El miércoles la meteorología mejoró y tuve un día realmente ocupado: probamos muchas cosas y aprendimos mucho, pero sobre todo cogí confianza con el coche y con el equipo, así que fue un día divertido y productivo. Creo que ha sido una gran forma de comenzar el año", señaló Palou tras los ensayos.

Pese a ello, el de Sant Esteve de Vilamajor no estaba totalmente satisfecho. "Estoy un poco decepcionado porque me veía más fuerte, pero cuatro banderas rojas consecutivas no me dejaron mejorar. Estuve entre los seis primeros casi todo el tiempo", destaca.

De lo que sí estaba satisfecho es de su rápida integración en el equipo y de trabajar con Eric Cowdin, uno de los ingenieros con mayor experiencia. "Me gusta su forma de trabajar. Hay 'feeling', desde el primer momento supe que nos entenderíamos bien. Ma da confianza y tranquilidad. Seguró que me enseñará muchas cosas, porque todavía hay mucho que aprender". Luego relató sonriendo una anécota: "Aunque siempre estudias mil veces el manual, en el momento de la verdad no sabía ponerlo en punto muerto. Estaba acostumbrado a otro volante, así que hay que aprender cosas".

Palou debió habituarse a muchas cosas, entre ellas al windscreen, protección de la cabeza del piloto, pero que es diferente al halo empleado en los campeonatos FIA porque tienen un parabrisas. "Ha sido una sorpresa. ¡Creo que es realmente bueno! Pensaba que tendríamos algún problema de visibilidad, pero no fue así".

Y ahora, tras su debut positivo en Austin, muchos quieren verlo en acción en Texas. Una buena actuación hoy, viernes, haría que muchos de los seguidores de Indycar se fijen en él.