Impresiones de los pilotos tras el Rally de México 2018

Durante el fin de semana tuvimos varios cambios en las posiciones punteras. Dani Sordo lideró la etapa del viernes, con Sébastien Loeb haciendo lo propio la mañana del sábado, hasta que llegaron al fatídico tramo 14 y dejaron la victoria en bandeja para Sébastien Ogier, que se encontraba a pocos segundos de ellos.

Así, el piloto de Gap se mostraba eufórico después de conseguir una de las mejores victorias de su vida. “Al llegar aquí, supe que tenía un fin de semana difícil por delante. Sabía que tenía que dar lo mejor de mí para conseguir un buen resultado”, admitió Ogier.

“Nunca pensé en la victoria. Cuando te enfrentas a personas que tienen una ventaja de un segundo por kilómetro en el primer día, es muy difícil de compensar. Fue una victoria fantástica con Julien en 2008, en la categoría Júnior. Es como un sueño estar aquí. Han pasado 10 años para nosotros y esta es una de mis mejores actuaciones”, agregó.

Dani Sordo también estaba visiblemente feliz con el segundo puesto cosechado en tierras mexicanas, a pesar de que estuvo peleando por la victoria, hasta que en la segunda pasada por el tramo de Guanajuatito perdió alrededor de 30 segundos.

“Hemos acreditado un buen ritmo aquí en temporadas anteriores, así que era optimista de que podríamos luchar por el podio este fin de semana. Estoy muy feliz de lograr este podio después de lo que ha sido un fin de semana competitivo pero difícil. No fue del todo sencillo. Incluso en el Power Stage hubo un momento aterrador cuando tuvimos un pinchazo en la rueda trasera derecha”, señaló el cántabro.

La otra cara de la moneda se la llevaron los pilotos de Citroën. Kris Meeke admitió que no ha estado a la altura de las expectativas. Con una posición de salida inmejorable y un buen coche, la victoria era posible, pero no supo sacar lo mejor de sí.

“Tengo que ser mejor, así de simple. Demasiados errores este fin de semana. Tenía todo en mis manos para luchar por la victoria. Tenía la posición de la carretera, el coche era lo suficientemente bueno para ganar y tenía el ritmo para ganar, pero no pude hacerlo. Frustrante”, afirmó el piloto irlandés.

Por su parte, Sébastien Loeb demostró un ritmo endiablado que no pudo rematar por un pinchazo y su correspondiente pérdida de tiempo. El alsaciano reveló que, habituado al procedimiento del Dakar, cometió un error al bajarse del coche a cambiar el neumático pinchado. No obstante, sabe que el ritmo fue bueno y disfrutó con los nuevos coches del WRC.

“Ahora tenemos una alarma en el coche por pinchazos. Vi la alarma y como en el Dakar, si hay alarma de pinchazo, nos detenemos y cambiamos. Pero fue una mala decisión, podría haber perdido mucho menos. Me divertí mucho en el coche, fue muy agradable correr con este nuevo WRC con más potencia y carga aerodinámica”.

“Tuve que adaptar un poco mi pilotaje a ello, pero lo hice bastante rápido y el ritmo fue bueno, así que disfruté peleando por el liderato. Fue un poco frustrante detener la pelea por el pinchazo, pero aun así fue un buen fin de semana”, expresó Loeb para concluir.

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