¿En qué se diferencian el SsangYong Rexton del Rexton DKR?

El SsangYong Rexton DKR y el Rexton de calle son dos coches que persiguen objetivos muy diferentes. Sin embargo ambos parten de un ADN muy similar, un espíritu todoterreno que les lleva a ser robustos como el que más. La versión que encontramos en los concesionarios tiene una estructura 'Quad Frame' de largueros y travesaños de cuatro capas, que además de permitir afrontar todas las dificultades orográficas que a uno se lo ocurran también está pensada para aislar de ruido y vibraciones el habitáculo. La carrocería está hecha en un 81,7% de acero de alta resistencia, y se une al bastidor a través de ocho soportes.

La variante que tratará de completar el Dakar en enero de 2019 comparte filosofía, aunque con una tecnología mucho más desarrollada como exige la competición. Su estructura es multitubular de cromo-molibdeno, y sobre ella se monta una ligera carrocería de fibra de vidrio. La robustez es de nuevo la nota dominante, aunque se han tenido otras cosas en cuenta que no son prioridades en el SsangYong Rexton de calle como la ligereza y las prestaciones.

Bajo el capó encontramos otra de las grandes diferencias entre estos vehículos. El SsangYong Rexton DKR equipa un V8 de gasolina de 6.2 litros en posición central longitudinal con una potencia de 450 caballos y un par máximo de 550 Newton metro. Éste se asocia a una caja de cambios secuencial de seis relaciones fabricada por el especialista Sadev. Por su parte la versión de calle apuesta por un Diesel de 2.2 litros, 181 caballos de potencia y 420 Newton metro de par máximo, que se asocia a una caja de cambios manual de seis marchas o a una automática de siete. Además el Rexton ofrece sistemas de tracción 4x2 o 4x4.

Las prestaciones de ambos vehículos son muy similares en lo que a velocidad punta se refiere pero muy diferentes si tenemos en cuenta la aceleración. El SsangYong Rexton DKR alcanza los 100 kilómetros/hora desde parado en 4,4 segundos, mientras que la versión de calle emplea 11,3 segundos. El modelo de carreras alcanza 195 kilómetros/hora, mientras que su 'hermano civilizado' llega a 185. El peso total del conjunto ayuda al coche de carreras, con 1.877 kilos por 2.243.

El interior de ambos coches es como comparar la noche y el día. El SsangYong Rexton DKR sólo cuenta con aire acondicionado como elemento de confort. El resto de puntos de interés tienen que ver con sistemas de información y adquisición de datos, navegación, gestión de diferentes elementos mecánicos o el reparto de frenada. Respecto a los sistemas de seguridad sólo equipa el Sentinel, responsable de alertar a los demás corredores cuando están a menos de 200 metros de otro vehículo. El Rexton de calle, por su parte, ofrece mucho más espacio en su interior y dispone de todas las ayudas a la conducción y elementos de confort que ha desarrollado la marca.

Por último hay que hablar del precio, que como uno puede imaginar es mucho más elevado en el caso del SsangYong Rexton DKR. La firma asiática no ha dado una cifra concreta, pero confirma que cada unidad costaría varios cientos de miles de euros de ponerse a la venta, mientras que el Rexton al que todos podemos aspirar tiene un precio de salida de entre 27.000 y 44.900 euros.