Alonso, "feliz" tras su test en IndyCar: "He aprendido mucho"
Fernando Alonso se siente "feliz" después de probar el IndyCar del equipo Andretti en el circuito de Barber, Alabama, donde hoy el piloto asturiano ha hecho su primer test en circuito rutero con el monoplaza de la categoría estadounidense. Quizá el primer paso hacia un volante a tiempo completo en 2019.
El piloto de McLaren se subió al chasis verde y azul que usó Carlos Muñoz en las 500 Millas de Indianápolis. Tras rodar con lluvia por la mañana, sus tiempos por la tarde estuvieron a unas pocas décimas de la Pole marcada en abril por Josef Newgarden, según informa el medio de comunicación estadounidense Racer.
Para Alonso, ésta ha sido la oportunidad de reencontrarse con el Dallara DW12 y probar por primera vez el nuevo UAK18, el paquete aerodinámico universal que los coches de la IndyCar equipan desde esta temporada.
El dos veces campeón del mundo ha terminado la jornada con sensaciones positivas, con la convicción de que ha ahondado en su conocimiento de la categoría.
"Era algo de lo que ya tenía ganas el año pasado", ha declarado en alusión a un test en circuito permanente.
"Después de las 500 Millas de Indianápolis, tuve algunas opciones de probar el coche en un circuito rutero. No pensé que fuese el momento correcto, pero este año sí que ha ocurrido y estoy contento".
"Me encanta estar detrás de un volante. Es un coche nuevo, una experiencia nueva. He aprendido muchas cosas del equipo, de los ingenieros, de todo el mundo. Un día feliz".
A Fernando le ha gustado el comportamiento del IndyCar en curva, pero no se atreve a decir si le convence más que en óvalo. Explica, eso sí, que carreras como la de Indianápolis tienen un componente de diversión singular que no se halla en los trazados convencionales.
"Quizá mi instinto me diría que –prefiero– el circuito rutero, porque es lo que he hecho toda mi vida, pero las 500 Millas de Indianápolis fueron una experiencia fantástica… Así que 50-50".
"Me encanta cómo se nota el monoplaza en el circuito rutero, pero me encanta cuando compites en ovales, el ‘timing’ de los rebufos, el tráfico… Los adelantamientos son un poco más fáciles en un oval, así que, si hablamos de acción en pista, la Indy 500 me encantó".
La meteorología no ha sido perfecta, pero Fernando hace una lectura positiva: las inclemencias le han ayudado a dominar el monoplaza en todos los escenarios posibles.
"Ha sido un buen día, uno divertido. Me encanta probar los nuevos coches y probar el IndyCar en un circuito rutero es algo especial. He tenido la suerte de probar bajo la lluvia, en condiciones intermedias y en seco, así que tengo una buena sensación con cada tipo de superficie. El tiempo nos ha ido bien. Por la tarde ha soplado algo de viento, pero, en general, ha sido un día positivo".
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