Acusan a Tesla de falsear la autonomía de sus coches y cancelar miles de revisiones de sus clientes

La sección en cuestión, bautizada internamente como Equipo de Desviación, tenía marcado el objetivo de cancelar 750 revisiones semanales y llegó a lidiar con un pico de 2.000 casos por semana. Cada cita cancelada suponía 1.000 dólares ahorrados para la empresa, según comunicaron los superiores a los comerciales.

La agencia Reuters menciona como ejemplo el caso de un ciudadano estadounidense llamado Alexandre Ponsin, que quería hacer un viaje entre Colorado y California en pleno invierno. La autonomía de su coche fue la mitad de la anunciada, por lo que se puso en contacto con el servicio técnico por si había algún problema en su Tesla. Estos luego le enviaron dos mensajes de texto. Con el primero, le dijeron que habían hecho un análisis remoto de su unidad y que no tenía ningún problema. Con el segundo, le cancelaron la visita que ya había concertado.

Y aquí es dónde empiezan los problemas.

Inicialmente, cuando un cliente tramitaba una queja como la de Alexandre, los técnicos de Tesla efectuaban un análisis remoto del vehículo para comprobar si tenía algún problema. Con el resultado en la mano, se ponían en contacto con el conductor para informarle.

En muchos casos, sin embargo, el coche no tenía ningún problema y lo que ocurría simplemente era que la lectura de la autonomía estimada se desviaba en exceso de la real. En este caso, los comerciales simplemente informaban a los conductores de que la cifra que veían en sus vehículos se correspondía con una estimación.

Pero el servicio técnico estaba tan saturado que pronto empezaron a surgir malas praxis.

La primera, una orden explícita a los comerciales de no informar a los conductores de otros problemas técnicos, incluso aunque el análisis que hubieran efectuado sobre su vehículo los hubiera puesto al descubierto.

La segunda, y efectiva desde finales de 2022, fue una orden de dejar de hacer análisis en remoto y cancelar las revisiones directamente, sin ni siquiera comprobar si había algún problema real en el vehículo de turno.

A efectos prácticos, Reuters explica que "se les dijo a miles de conductores que no había ningún problema en su coche" sin ni siquiera comprobar si era así.

EL CÁLCULO DE LA AUTONOMÍA, EL QUID DE LA CUESTIÓN

Es bien sabido que la autonomía homologada de los coches eléctricos no se corresponde con la autonomía real, de ahí que sea normal que los conductores experimenten una desviación respecto a las cifras prometidas por el fabricante.

Esto es así porque la homologación tiene lugar en unas condiciones perfectas que son muy difíciles de replicar en el mundo real, de ahí que las más mínimas variaciones puedan reducir los kilómetros que puede recorrer nuestro coche.

Por norma general, la autonomía real es siempre un 12,5% inferior a la autonomía homologada según se desprende de un informe publicado en abril por SAE International que tenía en cuenta los vehículos de 21 marcas distintas.

Pero la desviación de Tesla es aún peor, del 26%, según el mismo análisis.

Y aquí está la madre de todos los problemas: que el ordenador de a bordo del coche no siempre ofrece un dato real.

"Hace años, Tesla empezó a exagerar la autonomía potencial de sus vehículos manipulando el software que la calcula", reza la investigación de Reuters, que cita una fuente anónima que participó en el desarrollo del programario.

"La compañía decidió hace una década, por razones de márketing, escribir algoritmos de cálculo que darían cifras optimistas a sus conductores sobre los kilómetros que pueden recorrer con una batería completa".

"Luego, cuando la batería cae por debajo del 50%, el algoritmo muestra una proyección más realista para lo que les queda de autonomía", señala la misma fuente, que señala a Elon Musk como el ideólogo de esta filosofía.

Este software se programó en los orígenes de Tesla, cuando sólo tenía el Model S y el Roadster a la venda, y Reuters señala que es imposible saber con seguridad si todavía se usa en los vehículos que se comercializan actualmente.

Ahora bien: Corea del Sur ha sancionado recientemente a Tesla por exagerar la autonomía de sus coches, la EPA –Agencia de Protección Ambiental– ordenó a la empresa en 2020 que redujera un 3% la autonomía anunciada de sus vehículos y un estudio de Recurrent con 8.000 Teslas de 2022 y 2023 determinó que los vehículos no tienen en cuenta la temperatura exterior para calcular la autonomía que muestran a sus conductores, entre otros factores.