Entrevista a Carlos Sainz: "Quiero que la relación con Red Bull continúe así de bien, pase lo que pase en el futuro"

Dicen que no hay dos sin tres, y Carlos Sainz (Madrid, 1994) aborda su tercera temporada en la Fórmula 1, de importancia incluso mayor que las anteriores para su carrera, porque es la que él mismo ha marcado como su año de transición hacia un equipo de primer orden, dentro o más probablemente fuera de la órbita de Red Bull. Claro que para eso aún queda mucho tiempo y 20 Grandes Premios en los que debe mantener el listón a la altura que lo dejó en 2016, cuando fue reconocido por las principales encuestas a jefes de equipo, gurús y periodistas como uno entre los 5 y 10 mejores pilotos de la parrilla.

A este mérito, Carlos, que este año se presenta como la gran esperanza española en el Mundial tras la debacle de McLaren-Honda, suma el de ser considerado como uno de los pilotos más maduros en la parrilla pese a sus 22 años. Así pues, optamos por dejar a un lado las prestaciones del Toro Rosso STR12 o los pronósticos para el GP de Australia para conocer facetas más personales y sus planteamientos respecto a algunos temas candentes en un deporte que ya conoce con cierta profundidad.

Pregunta: Éste es su tercer año en la F1, y le venimos entrevistando desde bastante antes de llegar. Nosotros lo notamos, pero ¿cómo siente usted que la Fórmula 1 le ha cambiado como entrevistado?Carlos SAINZ: "Desde que llegas al paddock el primer año hasta el tercero… sí que cambias un poco en tu forma de ser con el periodista, en el saber estar y el saber desenvolverte. Coges confianza, quieras que no. Cada vez que estoy en un circuito me hacen tres o cuatro entrevistas por día, por lo que ganas mucha experiencia. Sigues siendo el mismo, pero quizá con más confianza".

P: ¿Las entrevistas van de esquivar dardos?Carlos SAINZ: "Depende del día. Hay días que llueven dardos por todas partes y todo parece una trinchera, has de esconderte como puedas. Luego hay días en los que también tú has de soltar algún dardo. Hay días que el rollo es muy bueno y otros que no tanto, así que depende mucho del día, de la situación y del momento".

P: Siempre me ha dicho que tener pareja y estar en la Fórmula 1 es algo muy difícil. ¿Cómo lo llevan usted y ella?Carlos SAINZ: "Es un tema que llevo con extrema privacidad, ya lo habréis visto. No veréis nada mío por ahí o de mi pareja. Lo llevo con extrema privacidad, pero siempre he dicho que, en este mundo, si vas a tener novia te tiene que gustar mucho y tienes que tener mucha confianza. Tiene que haber una confianza mutua exagerada. No digo mucha, sino exagerada. Pasas mucho tiempo fuera de casa… Lo bueno es que tengo la suerte de tener el ejemplo perfecto en mi casa, con mis padres. Mi padre ha llegado a estar 300 días al año fuera de casa y ha sabido en todo momento llevar la relación a la perfección con mi madre. Son el ejemplo de pareja para mí. Tengo el ejemplo de mujer en mi casa, la que me gustaría tener que se pareciera un poco a mi madre".

P: Su padre siempre ha dicho de usted que es una muy buena persona. ¿Cómo de compatible es esa personalidad con el hecho de tener que ser un caimán en el deporte, que es una expresión que usted ha empleado en alguna ocasión?Carlos SAINZ: "Incluso de pequeño, sí, siempre he tendido a ser demasiado buen tío para el mundo tan ‘cabrito’ en el que estoy. Me ha costado su tiempo cambiar, pero lo tuve que hacer. En 2009, cuando di el salto del karting nacional al internacional, tuve que ponerme las pilas. Ahí fue cuando mi padre me dio el consejo que creo que más me ha servido hasta ahora: ‘o comes o te comen’. Supervivencia. He creado mi carácter año a año y creo que ahora mismo hay pocos en la Fórmula 1 más agresivos que yo. Pocos muerden más que yo en la pista. Y pocos lo deben hacer, por lo que he oído de otras bocas en el paddock".

P: Al margen de la familia y las amistades, ¿qué es lo que más echa de menos?Carlos SAINZ: "Dormir en mi propia cama y tener un poco más de libertad en el día a día en cuanto a horarios. La flexibilidad. De los 365 días que tiene el año, creo que en 300 tengo un horario programado desde que me levanto hasta que me acuesto. Eso, quieras que no, también afecta mentalmente cuando viajas, coges aviones y demás. Tengo que estar en todas partes a cierta hora. No es como en un trabajo, no es llegar a las 09:00 e irte a las 19:00. Es llegar a las 07:00, desayunar a las 07:30, el masaje de las 07.45, el calentamiento a las 08:00… Es un horario que has de cumplir en 30 ocasiones diferentes durante el día. Somos 60 personas en el circuito y otras 400 en la fábrica de Faenza, y si no se hace así, todo se descuadra. A lo mejor, la gente dice: ‘300 días al año de horarios, eso lo tiene todo el mundo’. Pero no, durante el día tienes otros 30 minihorarios que has de cumplir. Cuando llegas a casa en invierno y te tomas esa semana de vacaciones, o dos semanas, lo primero que quieres es no tener nada que cumplir para el día siguiente. Si lo haces, es porque te apetece y el cuerpo te lo pide".

P: Cine, música, deportes… ¿ha descubierto alguna joya este invierno?Carlos SAINZ: "Aparte de ir mucho al cine, porque ahora tengo novia y cuando tienes novia vas mucho más al cine… la verdad es que no me ha gustado ninguna película, realmente. ¡No me quedo con ninguna en especial! En otros temas, quizá lo más interesante que he descubierto es el crossfit como método de entrenamiento. Creo que me ha venido muy bien para este año. Hemos innovado en ese sentido sobre cómo poner a punto el cuerpo para las fuerzas de un Fórmula 1 y me ha gustado. Estoy contento y confiado tras el invierno. Sé que ahí hemos descubierto cosas interesantes".

P: Nos ha faltado la música. ¿Qué escucha ahora Carlos Sainz?Carlos SAINZ: "¿Música? He estado escuchando bastante tiempo 21 Pilots, también un poco de Kings of Leon, el nuevo disco que sacaron. Son un fijo para mí. Luego de todo un poco… mis cosas de Rap y Hip-Hop, pero como no he viajado tanto lo he escuchado menos. Suelo usarlo como una arma de entretenimiento en los aviones, para averiguar lo que dicen… las barbaridades que dicen [risas]".

P: Quería hablarle de Bernie Ecclestone. Bernie ya no está aquí. Ha estado 40 años, pero de repente ya nadie pregunta por él. Se habla mucho sobre el derecho al olvido, pero parece que aquí se olvida demasiado pronto. ¿No le asusta ese nivel de olvido en la Fórmula 1?Carlos SAINZ: "Sí, pero es lo que llevo diciendo de la Fórmula 1: que la Fórmula 1 no tiene memoria ni para el más importante de la historia, que es Bernie porque ha sido quien la ha creado como es hoy. La Fórmula 1 no tiene memoria ni para él. Lo puedes aplicar a cualquier piloto y equipo. Mercedes llega a la primera carrera, hace un quinto y un sexto en la clasificación, Hamilton y Bottas hacen una mala estrategia y entonces Mercedes ya es un desastre. Ya nadie se acordaría de los tres años anteriores. Sí que es verdad que se podría haber hecho más en esta Fórmula 1 de hoy en día para hacerla más atractiva para los aficionados, o llamémosle como quieras, pero sin Bernie Ecclestone, todo esto que veis aquí, estos montajes, no estarían. Lo de siempre: la Fórmula 1 no tiene memoria y por eso es un deporte tan especial a veces".

P: Usted tomó muchas decisiones el año pasado, entre ellas una que creo muy inteligente: permanecer en Toro Rosso. Tuvo señorío con Red Bull ante las circunstancias que le permitían saltar a Renault para este año. ¿Cree que eso puede hacer que el año que viene, o cuando tenga que marcharse, puedan guardar el contrato en un cajón, ponga lo que ponga, darse la mano y decirse ‘hasta pronto’?Carlos SAINZ: "Yo espero que sea así. Red Bull sabe perfectamente lo que hubo encima de la mesa. Supo perfectamente las posibilidades que había. Ojalá Red Bull lo tenga en cuenta a la hora de tomar una decisión, igual que yo he tenido en cuenta los cinco años en los que han apostado por mí en las categorías inferiores. Yo a Red Bull se lo debo prácticamente todo. Les estoy súper agradecido. También a Toro Rosso, por haberme educado tanto durante los dos primeros años. Por eso soy muy positivo sobre este tercer año juntos y octavo como piloto Red Bull. Me siento como en casa. Con Helmut Marko, Christian Horner, Franz Tost y Dietrich Mateschitz obviamente hay una relación muy buena. Quiero que continúe así, pase lo que pase. Cuando alguien apuesta por ti durante tanto tiempo, da igual dónde acabes que la relación tiene que acabar bien".

P: Hace un par de años nos dijo que estaba al 50% de su nivel como piloto. Acababa de llegar y todavía tenía mucho en lo que progresar. ¿Dónde está ahora?Carlos SAINZ: "Ahora hemos subido. No sabría decir exactamente en qué porcentaje. Es muy difícil de medir, pero sí que sé que he progresado mucho desde mi primera carrera en la Fórmula 1 hasta ahora. En realidad, siempre progresas. Incluso con las primeras vueltas con el coche nuevo. Hoy en día, ya hay veces en las que dices ‘me apetece correr más’, y lo haces, o no, en función de la situación concreta. Notas más madurez, más solidez y más saber estar en los distintos momentos. Ése es uno de los comentarios que me hizo mi ingeniero –Marco Matassa, n.d.r.–. El primer día de pruebas con el STR12 habíamos tenido problemas, pero en las 50 vueltas que había dado, había hecho lo que me habían pedido. Del Carlos Sainz del año pasado de los test al de ahora ha habido otro cambio, otra mejora. Eso, quieras que no, te hace sentir bien".

P: Voy a plantearle un supuesto. Imaginemos que un equipo oficial se interesa por usted. Imaginemos que un patrocinador fuerte cree en su talento y está dispuesto a apoyarle. ¿Qué pensaría de eso y cómo se sentiría, pensando que a principios de 2015 quizá aún había alguien que le decía que estaba en Toro Rosso por ser ‘hijo de’?Carlos SAINZ: "Eso es algo en lo que he pensado bastante estos años. Me ha ido bien. Es una de las cosas que más rabia interior me crea, que más ganas me da de hacerlo bien. Es esa gente que seguía pensando que había llegado a la Fórmula 1 por ser ‘hijo de’, y que de otro modo no habría llegado. La gente que decía eso es, en el fondo, la que me ha ayudado a hacer esos dos primeros años que yo considero tan buenos, y algo que me ha posicionado ahora en un año tan importante para dar el siguiente salto. Entonces sí, seguiré alimentándome de ellos y de los que sigan pensando eso".

P: Este año le acompaña otra persona a las carreras. Sé que tiene un gran apego por quien había sido su representante hasta ahora. ¿Qué tal está la situación?Carlos SAINZ: "Está siendo un pequeño período de transición, porque al final mi equipo como habéis visto es bastante pequeño. Bastante familiar, amigable. No hay figuras clave de mánager o de representantes como tal. Todos somos una piña, tanto mi padre como esta nueva persona, que además es mi primo. Todos somos mi mánager. Yo tomo la misma decisión que toma mi padre o que toma él. Todos somos el piloto. Si yo meto la pata en la pista, la metemos todos. Somos todos. Representante y acompañante para ir a las carrera. Insisto: es un deporte más complicado de lo que parece y hay que prestar atención al detalle en todo lo que se dice, en todo lo que se hace, en cómo te mueves. Si has movido el dedo meñique así o asá, todo el mundo opina. Al final necesito una persona, que ya lo era Borja Ortiz-Echagüe pero que como sabéis no va a poder seguir acompañándome, que sea de confianza y que me ayude a lidiar con todas esas cosas".

P: Le voy a decir tres momentos. Cuando en 2014 parecía que tenía grandes dificultades para llegar a la Fórmula 1, cuando en 2015 cada micrófono que le ponían delante era para hablarle de Verstappen y cuando en 2016 le faltaban siempre 20 kilómetros/hora para adelantar. ¿Cuál ha sido el más duro?Carlos SAINZ: "Creo que si por algo se caracteriza mi carrera deportiva es por haber tenido bastantes obstáculos que luego hemos podido superar. Pero creo que lo que más pronto me espabiló fue cuando en 2014 me dieron prácticamente un ultimátum. Decía: ‘Me da igual, me van a subir a mí porque no les queda más remedio’. Pero veía a mi entorno preocupado, porque veían que no, que no había un espacio físico para mí en la Fórmula 1, pero yo no me lo acabé de creer. ‘No puede ser que no me vayan a subir’, me decía. Curiosamente, me iba a dormir y no estaba preocupado… gracias a Dios, luego encontré un sitio con la salida de Sebastian Vettel de Red Bull y demás. Si no, hubiera sido un palo brutal. Así que creo que el palo más duro fue el que sí pasó, que fue cuando Kvyat pasó a Toro Rosso y yo a las World Series".

P: Alguna vez ha pensado que el movimiento de Fernando Alonso a McLaren pudo facilitarle su debut?Carlos SAINZ: "Es que es así. Es una verdad como una casa. Si Fernando no se llega a haber ido a McLaren, yo probablemente no habría llegado a la Fórmula 1 en 2015. Quizá en 2016, pero no en 2015 porque no había un espacio físico para mí. Se lo he agradecido de todas las formas posibles y por haber. Y ya no el que se fuera a McLaren, sino los detalles que ha tenido conmigo en toda su carrera deportiva".