Red Bull

Newey admite que estuvo cerca de Ferrari por el 'bajón' del motor Renault

04/05/2022 18:21

Red Bull tuvo mucho éxito con Renault durante los años previos a la era híbrida, pero todo se torció a partir de 2014. El rendimiento de la unidad de potencia francesa estaba por debajo de sus rivales, lo que llevó a Adrian Newey a perder la ilusión en la Fórmula 1. El británico no quería marcharse de Red Bull, a pesar de tener una buena oferta de Ferrari, pero reconoce que dejó de sentir el deporte como antes.

Red Bull ganó sus cuatro títulos junto a Renault, pero el rendimiento de la marca del rombo cayó en picado con la llegada de los motores híbridos. La falta de competitividad del propulsor hizo que Newey se desencantara de la Fórmula 1 y ofertas para marcharse tampoco le faltaron, pues Ferrari le hizo una propuesta bastante atractiva.

"Por aquel entonces estaba bastante desilusionado con todo esto. Obviamente, estuve a punto de unirme a Ferrari, pero no lo hice. Aunque me sentía feliz en Red Bull y no quería cambiar de equipo, el hecho de estar atascados con un motor poco competitivo me había llevado a pensar si cambiar de equipo", ha afirmado al portal web F1i.com.

Adrian no sólo culpa a la falta de rendimiento del motor Renault, si no a la actitud de los franceses. El jefe técnico de Red Bull les acusa de estar "más interesados en el marketing que supone estar en Fórmula 1 que en ser realmente competitivos".

"Si tienes un socio de motores que viene con una unidad de potencia inferior a la del resto de competidores, pero muestra un verdadero deseo de arreglarlo y avanzar, lo aceptas. Pero si no reconoce que está por detrás y no parece interesado en hacer nada al respecto, es mucho más difícil. Eso me hizo perder la motivación. Seguía disfrutando de la Fórmula 1, pero no de la misma manera", ha añadido.

Newey recibió una oferta que se alejaba de la competición y que le 'salvó' de abandonar la Fórmula 1. Adrian se embarcó en el proyecto del Aston Martin Valkyrie hasta que Honda llegó al equipo y le devolvió la ilusión. 

"No quería cambiar de equipo y ahí es donde entró el proyecto del coche de calle. Eso me mantuvo motivado y ocupado durante un tiempo. Luego, cuando firmamos el acuerdo con Honda y teníamos un socio que podía no estar del todo ahí, pero que tenía el impulso y la motivación para llegar, cambió las cosas", ha reconocido.

Ahora, el jefe técnico de Red Bull se plantea hacia dónde dirigir su carrera profesional. Newey sigue disfrutando de su trabajo con la nueva generación de coches, a pesar de que en un primer momento los nuevos coches le "deprimieron bastante". Una de las opciones que contempla es ceder su puesto a otra persona para ocupar un rol más general.

"Quizá intentar llegar a una posición en la que pueda participar desde una visión general, que creo que es lo que Rory Byrne hace en Ferrari ahora. Es un lugar bastante agradable para estar, siempre que puedas contribuir de forma positiva. No quiero ser una distracción y que la gente diga 'Oh, Adrian va a venir hoy'. Eso significa entregar las riendas a alguien que sea responsable y yo sería puramente colaborador, siempre que fuera útil", ha apuntado Adrian para cerrar.