La rabia de Ferrari en Imola dice más que su resultado
Ferrari tuvo en su mano conseguir el primer podio de la temporada en Imola: Charles Leclerc iba segundo antes de la bandera roja. Sin embargo, el accidente entre Bottas y Russell cambió por completo la carrera y dejó a la Scuderia con la miel en los labios. No obstante, esa insatisfacción por no haber conseguido más nos hablan de una nueva Ferrari.
Repasamos las claves de la carrera de los rojos, que nos indican que estamos ante una Ferrari totalmente nueva.
LA RABIA
Paso adelante de Ferrari en Imola. Tras un año en el que los 'tifosi' pedían Grandes Premios en Italia a puerta cerrada para no pasar vergüenza, la Scuderia está en el camino correcto. El equipo consiguió un cuarto y un quinto puesto en casa. En dos carreras han sumado más del 25% de los puntos conseguidos en todo el año pasado.
Esa rabia e insatisfacción por lo que podía haber sido, pues Leclerc marchaba segundo antes de la bandera roja, habla más de ellos que su resultado de ayer y también promete mucho más.
"Este resultado confirma que el trabajo que estamos haciendo es en la dirección correcta. El hecho de que estamos descontentos por no haber conseguido al menos un piloto en el podio es una prueba más de eso. Podemos decir definitivamente que el resultado de estas dos primeras carreras es positivo", ha comentado Mattia Binotto, jefe del equipo.
DOS PILOTOS
Sainz sirve a Ferrari. El fichaje del español se demuestra como un arma útil en la batalla por el tercer lugar en el Campeonato de Constructores y es que la Scuderia ha conseguido algo que no lograba desde los Grandes Premios de Japón y México de 2019, conseguir dobles puntos en dos carreras consecutivas, algo muy valioso en la batalla contra McLaren, respecto a los que sumaron sólo un punto en menos en Imola.
"Desde la segunda mitad de 2019, en concreto en las carreras de Japón y México de este año, no teníamos a dos pilotos en los puntos en dos carreras consecutivas", ha destacado Binotto.
UN SAINZ FUERTE
Ferrari tuvo la suerte de contar con una gran baza, Carlos Sainz. El español fue el piloto que más puntos sumó de los que estrenan equipo este año, lo que habla de su buena y rápida adaptación al coche. Un arma que les hace fuertes frente a McLaren, su principal rival. Carlos se hizo con una quinta posición, mientras que Daniel Ricciardo sólo pudo ser sexto.
Carlos fue incluso más rápido de lo que le pedían en el equipo, arriesgó al máximo y se supo reponer de los errores que cometió durante la carrera.
"Sainz pilotó bien, la clasificación de ayer fue una excepción. Espero un Carlos fuerte en las próximas carreras", ha asegurado Binotto en palabras al diario italiano La Repubblica.
GANADORES DE UNA LOTERÍA MUY PARTICULAR
Ferrari ha dado un paso adelante, sí, pero también hay que matizarlo. Los de rojo fueron ganadores de una carrera bastante particular, cuyas circunstancias no se espera que se repitan con frecuencia durante la temporada. Hablamos de las circunstancias particulares porque se beneficiaron de que, por ejemplo, Sergio Pérez y Valtteri Bottas, no tuvieran una buena carrera –algo que no es habitual– y también de los fallos de AlphaTauri, que son también una amenaza para ellos, aunque McLaren y Ferrari tengan una alineación más experimentada.
Imola también dejó a la vista otra carencia de Ferrari, su falta de velocidad en las rectas con respecto a McLaren, algo que destacó especialmente Leclerc y en lo que tendrán que ponerse a trabajar.
Así, Imola es 'una victoria', sí, pero están obligados a mejorar si no quieren perder en la carrera por ser los mejores del resto, algo que ni McLaren ni AlphaTauri les pondrán nada fácil.
