Tratan el asfalto de Turquía para evitar la falta de agarre de 2020

La Fórmula 1 volvió a Turquía el año pasado, para reconfigurar un calendario alterado por la covid-19, tras casi una década sin correr en el trazado y la pista se tuvo que reasfaltar para el regreso de la competición.

Sin embargo, los plazos tan cortos de preparación hicieron que el reasfaltado se completara sólo dos semanas antes de la carrera, lo que generó una importante falta de agarre en la nueva superficie y problemas para mantener los neumáticos en temperatura. Además, la lluvia complicó todavía más las condiciones, que Lewis Hamilton describió como "aterradoras".

El director de carrera de la FIA, Michael Masi, ha informado a los equipos que como parte de las actualizaciones que se han hecho para el Gran Premio de Turquía de este año se ha lavado toda la superficie de la pista con agua a alta presión para evitar los problemas de agarre que hubo el año pasado.

"Toda la superficie de la pista se ha tratado para mejorar el nivel de agarre. De forma regular cada temporada enviamos actualizaciones a los equipos sobre cualquier cambio para los próximos eventos, ya sean las barreras, las vallas, las puertas o lo que sea. Pueden ser las áreas de reasfaltado", ha comentado Masi en declaraciones que publica la revista británica Autosport.

El aumento de agarre supondrá una ventaja para los equipos, pero también una desventaja pues los datos recopilados el año pasado no les servirán.

"La superficie de Turquía se ha limpiado con agua a alta presión, un tratamiento regular. Hemos visto que eso se usa normalmente en Singapur, donde las carreteras públicas que se usan se reasfaltan de forma regular por el movimiento. Eso es lo que ha pasado en Turquía junto con otros cambios", ha añadido Masi.