Adamo lo vuelve a hacer: Breen sustituye a Loeb en Suecia

Andrea Adamo lo ha vuelto a hacer. No ha dudado en alterar el programa deportivo anunciado para buscar las mejores opciones cara al título de constructores. Y ello pasa por elegir para el tercer coche al piloto que cree mejor posicionado para aportar puntos al equipo. 

"Hemos tomado la decisión de alinear a Craig Breen en el Rally de Suecia al lado de Thierry Neuville y Ott Tänak, con el fin de disponer del equipo más competitivo posible para este rally y tener las mejores opciones disponibles teniendo en cuenta las posiciones de salida", dijo Adamo.

Está claro que Breen saldrá retrasado dentro de los WRC Plus y eso puede ser un arma importante en Suecia. Si hay nieve fresca, los primeros 'barrerán' pista y abrirán camino y dejarán a Breen en buena posición de lograr un resultado espectacular. 

Pero si hay hielo deshaciéndose, se verá perjudicado. Y el pronóstico meteorológico sobre Suecia es imposible en estos momentos debido a la falta de nieve.

El año pasado ya empleó esta táctica, empleando a nada menos que cinco pilotos a lo largo del campeonato. Sólo Thierry Neuville fue fijo y los restantes se fueron alternando: Sébastien Loeb, Andreas Mikkelsen, Craig Bree y por supuesto 'nuestro' Dani Sordo. Este año parece que la tónica se repite.

Adamo es un personaje peculiar. El pasado año dijo que quizás habría que resucitar las rondas y también que su cometido era buscar la mejor alineación para que Hyundai ganara el título de constructores. El pasado año, con su táctica lo consiguió, pero se le escapó el de pilotos. Para 2020 ha hecho una apuesta todavía más fuerte, haciéndose con los servicios de Ott Tänak.

Con dos gallos en el corral, el ambicioso actual campeón y el que quiere serlo a toda costa, Adamo sabe que el tercer coche es vital porque corre el riesgo de que sus dos 'gallos' se peleen tanto que en cada prueba uno de ellos se deje espolones por el camino. En Montecarlo vio el durísimo accidente de Tänak, milagrosamente sin consecuencias para el estonio y su copiloto.

Un accidente que tiene un origen claro: los bajos del coche tocaron con dos o tres 'burbujas' de asfalto le hicieron perder unos centímetros la trayectoria, suficientes para poner dos ruedas en el terraplén y comenzar una sesión de volteretas inquietantes.

Y seguro que en su decisión ha pesado el decepcionante Montecarlo de Loeb, tal como admite el piloto francés. De esta forma Adamo quiere minimizar riesgos y dar tiempo a Loeb para que se recupera anímicamente.