Toyota quiere batir el récord de vuelta en Le Mans

La marca japonesa acepta las reglas, pero también desea demostrar de lo que es capaz su Toyota TS050 Hybrid LMP1 si no fuese por los hándicaps que le han impuesto, aunque los ha aceptado porque también cree necesario que la afición vea carreras.

Es cierto. Para lograr su objetivo, Toyota puede intentar batir el récord de Nürbugring, que hoy tiene uno de sus exrivales, el Porsche 919 Hybrid. Sería un gran golpe publicitario, sin duda, pero para Toyota Gazoo Racing sólo sería una opción alternativa, un plan B.

Lo que realmente les gustarían es algo mucho más cercano al WEC. Quizás el batir el récord de vuelta de Le Mans, que el año pasado estableció Kamui Kobayashi en 3'13''793… quizás romper la barrera de los 3'10'', aunque esto suena muy ambicioso.

"El récord del año pasado de Kamui fue un momento inolvidable", recuerda Rob Leupen, vicepresidente de TMG. "Pensamos que podíamos llegar al menos a 3'15'' y aquello fue sensacional. Nos gusta superar los límites".

Toyota buscaría una fórmula para poder sacudirse de encima todas las cortapisas, liberar toda la potencia del coche y alcanzar el mayor rendimiento posible. Piensan que la aerodinámica nueva, junto con el motor impulsado al máximo, puede pulverizar el récord del año pasado.

Quizás el ACO puede autorizar algo así en la jornada de test previos a Le Mans. Sería un puntazo para Toyota… pero también quedarían en evidencia unas normas. También sería posible en los entrenamientos libres, aunque más complicado y siempre quedaría la posibilidad de una exhibición durante el Le Mans Classic.

El Plan B sería ir a por los récords de Spa y Nürburgring en sesiones privadas, algo que no puede hacerse en Le Mans porque parte del circuito esta formado por carreteras públicas.