Coche o moto, ¿qué es más barato en ciudad? Ésta es mi experiencia

A finales de 2004, la Dirección General de Tráfico –DGT– estableció que los titulares de un permiso de conducir B con más de tres años de experiencia podrían conducir motocicletas de hasta 11 kilovatios –15 caballos–, lo que disparó la compra de motos de 125 centímetros cúbicos, principalmente scooters. Este crecimiento se mantuvo durante años y, a día de hoy, muchos residentes en grandes ciudades y sus áreas metropolitanas optan por los vehículos de dos ruedas a motor como medio de transporte para sus desplazamientos cotidianos.

MI EXPERIENCIA

En mi caso, por ejemplo, soy propietario de un utilitario Diesel de pequeña cilindrada que mi mujer o yo utilizamos a diario para llevar a nuestra hija al colegio –según a quien le encaja mejor en la agenda–, ir a comprar los fines de semana, o hacer algún viaje un par de veces al año.

No obstante, el coche no resuelve todas mis necesidades de movilidad, puesto que para ir al trabajo y, en especial, a la estación del AVE o el aeropuerto cuando viajo a presentaciones, me muevo en un scooter de 125 centímetros cúbicos. Éste me resulta especialmente práctico por lo fácil que es encontrar aparcamiento en cualquier lugar –además de ser gratis incluso en la estación del AVE o el aeropuerto–, y por la posibilidad de meter el casco y la chaqueta en el baúl bajo el asiento al llegar a mi destino.

Cabe señalar que vivo en las afueras de una ciudad como Valencia, y que hago un trayecto diario aproximado de unos 70 kilómetros entre carreteras convencionales, vías rápidas y suelo urbano. En total, al cabo del año recorro unos 10.000 kilómetros en moto, más otros 20.000 que recorre el coche, vaya yo al volante o no. Así pues, se puede decir que dispongo de datos suficientes para hacer un cálculo aproximado, aunque bastante fiable, de la diferencia de coste entre circular en coche o en moto en el día a día.

PROS Y CONTRAS ENTRE EL COCHE Y LA MOTO

En general, existe un gran consenso respecto a que circular en moto por la ciudad es más ágil y rápido que en coche, como compruebo en primera persona al ir y volver del trabajo. Pero también son conocidos los inconvenientes de los vehículos de dos ruedas, tales como estar expuesto a las inclemencias del tiempo y la dificultad para transportar bultos grandes o a varios pasajeros. Por su lado, el coche resulta mucho más práctico y cómodo para viajar, especialmente que una moto de 125 centímetros cúbicos, con la que es casi imposible hacer un recorrido de más de 100 kilómetros del tirón sin que se caliente o acabar agotado.

Al margen de estas obviedades, la moto tiene la ventaja de que puedes aparcar prácticamente en la puerta de casi cualquier lugar sin tener que pagar el parking o el Servicio de Estacionamiento Regulado –SER–, algo cada vez más difícil para las cuatro ruedas en las grandes urbes. No obstante, no está tan claro si circular en moto es mucho más caro o más barato que hacerlo en coche, por lo que voy a proceder a hacer un repaso por los distintos gastos que afronto cada año según el vehículo. Puesto que recorro aproximadamente el doble de kilómetros en coche que en moto, resulta sencillo hacer el cálculo de cuánto cuesta uno respecto al otro.

PRECIO, SEGURO E IMPUESTOS

En primer lugar, y aunque no afecta de manera directa a su coste por uso, pues la vida media de un coche suele ser muy superior en kilómetros a la de una moto, el precio medio de adquisición de un turismo utilitario nuevo de pequeña cilindrada a día de hoy es de unos 13.000 euros –16.000 si miramos al segmento compacto–, frente a 4.000 euros –entre 3.500 y 4.500 euros según modelos– de un scooter nuevo de 125 centímetros cúbicos.

Una vez hemos comprado el coche o la moto, es indispensable contar con un seguro. El precio de estos puede variar en gran medida en función de la potencia del vehículo, las coberturas, la edad del conductor, sus años de experiencia al volante y su historial de siniestralidad pero, en cualquier caso, el seguro de moto es más barato. En mi caso, pago 379 euros al año por un todo riesgo con franquicia de 150 euros para el coche, y 78 euros al año por un seguro a terceros con asistencia para la moto.

El siguiente gasto es el impuesto de circulación, pues también puede variar mucho en función del vehículo y la ciudad. En Valencia, la tasa para una moto de 125 es de 7,68 euros, frente a 58,87 euros de un coche utilitario Diesel de menos de 100 caballos. Nuevamente, resulta mucho más económica la moto que el coche.

Otro punto importante, aunque no nos preocupe durante los primeros años, es la Inspección Técnica de Vehículos y su tasa pertinente. Tanto los coches como las motos nuevas no están obligados a pasar la primera ITV hasta cuatro años después de su matriculación, pero luego deberán pasarla cada dos años hasta cumplir diez, y anualmente en adelante. El precio de la ITV en Valencia para una moto de 125 es de 26,61 euros, y de 67,92 euros para un coche Diesel; más del doble.

COMBUSTIBLE, NEUMÁTICOS Y MANTENIMIENTO

Una vez contabilizados los gastos fijos tanto para el coche como para la moto, veamos la evolución del coste de uso y mantenimiento:

Hemos dicho que cada año recorro alrededor de 10.000 kilómetros con la moto y, más allá de cifras homologadas de consumo, mi experiencia es que llenar el depósito con 10 litros de gasolina me cuesta de media 13 euros, que dan para unos 250 kilómetros si no corro más de la cuenta. Así, el coste de combustible para la moto a final de año ronda entre 450 y 500 euros en función del precio de la gasolina y las prisas.

El coche, por su parte, homologa un consumo medio de 3,6 litros a los 100, aunque en realidad resulta difícil mantenerlo por debajo de los 5,5 si se circula por ciudad. Una vez más, y basándonos exclusivamente en mi experiencia, llenar el depósito de un utilitario pequeño con 50 litros de Diesel, aproximadamente, me cuesta alrededor de 65 euros, y con ellos recorro unos 800 kilómetros. Es decir, al año gasto entre 1.500 y 1.600 euros en Diesel para recorrer alrededor de 20.000 kilómetros, la mitad de ellos en ciudad.

Otro coste por uso que generalmente se pasa por alto al comparar el uso de un coche frente a una moto es el precio de los neumáticos y su desgaste. Con la moto, aproximadamente cada dos años tengo que cambiarle la rueda trasera, y su precio es de 50 euros con montaje incluido. La delantera, sin embargo, sufre un menos, y su vida se extiende hasta los tres años o 30.000 kilómetros. Además, su precio –45 euros con montaje– es más económico. Podemos decir, por tanto, que el desgaste medio de los neumáticos de la moto tiene un coste aproximado de 40 euros al año.

En el coche, el kilometraje de los neumáticos es mayor, aunque no su longevidad. Los del eje anterior –mi coche es de delantera, como los de la mayoría– los cambio aproximadamente cada dos años o 40.000 kilómetros, y cada 50.000 los del eje trasero, ya que sufren menos desgaste. El precio de cada juego de neumáticos –185/60 R14– con montaje incluido suele rondar los 200 euros, lo que nos da un coste de desgaste aproximado de 100 euros al año en neumáticos para el coche.

Así, dada la cantidad de kilómetros que recorro cada año, es frecuente que el coche o la moto pasen por el taller para un cambio de aceite, filtros y/o frenos. La moto va a revisión cada 4.000 kilómetros, y se le cambia el aceite y el filtro por un precio aproximado de 50 euros dos veces al año. Además, cada 20.000 kilómetros –dos años en mi caso– es recomendable reemplazar la correa del variador, lo que tiene un precio de 150 euros con el cambio de aceite incluido. Al mismo tiempo que el cambio de la rueda delantera, a los 30.000 kilómetros, aprovecho también para sustituir las pastillas de freno delanteras y traseras, con un coste de 60 euros en total. Si sumamos el coste los cambios de aceite, la correa del variador y los frenos, el coste de mantenimiento de la moto es de unos 170 euros al año aproximadamente.

Por lo que respecta al coche, los cambios de aceite son cada 15.000 kilómetros y cuestan unos 80 euros en un taller generalista de una cadena de reconocido prestigio. Además, cada dos cambios de aceite se sustituyen también los filtros del aire y combustible, lo que eleva el precio hasta 120 euros, aproximadamente. Las pastillas de freno del coche también tienen una duración muy superior a las de la moto, tal vez porque con el coche hago más kilómetros de carretera que con la moto, y su vida se suele alargar hasta los 100.000 kilómetros –unos cinco años–, pero su coste también es muy superior. El precio aproximado de cambiar las cuatro pastillas de freno es de 180 euros; unos 36 euros al año si lo prorrateamos. Por último, las correas de distribución y servicio, así como la bomba de agua, se deben cambiar a los 120.000 kilómetros. Si queremos ser totalmente justos, debemos dividir los 400 euros que cuesta entre los seis años que dura en mi caso. Así, el coste mínimo de mantenimiento del coche es de unos 200 euros al año, más o menos.

¿COCHE O MOTO? CONCLUSIÓN

Como se puede ver, en mi caso, el coste por uso y mantenimiento [*] de la moto es aproximadamente de 800 euros para recorrer 10.000 kilómetros, mientras que el del coche suma casi 2.350 euros para el doble de kilómetros. Aunque la diferencia pueda parecer abismal, en realidad es una diferencia de sólo 4 euros cada 100 kilómetros más barato si se circula en moto que en coche, lo que hace que esta variación ya no parezca tan acusada. Cabe señalar que el cálculo se ha realizado para un coche Diesel de pequeña cilindrada comparado con una moto de 125, y que estos datos pueden variar muy significativamente según la marca, el modelo y la potencia de los vehículos.

En mi caso particular, el hecho de tener coche y moto está condicionado fundamentalmente por mis circunstancias personales y familiares, pero tengo claro que, aunque claramente prefiero la moto para mis desplazamientos cotidianos por la ciudad por su mayor comodidad y economía de uso, no puedo prescindir totalmente del coche. Afortunadamente, me encanta conducir cualquier máquina que tenga ruedas, por lo que no me importa si un par de veces por semana tengo que coger el coche y sufrir algunos atascos.

[*] En el estudio no se han tenido en cuenta las posibles averías, el cambio del embrague o el coste de los aparcamientos, puesto que estos varían mucho según el uso y están sujetos a los factores externos.

Scooter de 125 centímetros cúbicos - 10.000 kilómetros/año

• Seguro a terceros con asistencia - 78 euros/año
• Impuesto de circulación - 7,68 euros/año
• ITV a los 4 años - 26,61 euros (6,65 euros/año)
• 10 litros de gasolina para 250 kilómetros - 12 euros = 480 euros/año
• Cambio de aceite cada 4.000 kilómetros - 50 euros (100 euros/año)
• Cambio de correa de variador a los 20.000 kilómetros - 120 euros (60 euros/año)
• Cambio rueda trasera 20.000 kilómetros - 50 euros (25 euros/año)
• Cambio rueda delantera cada 30.000 kilómetros = 45 euros (15 euros/año)
• TOTAL 762,33 euros/año

Utilitario Diesel de 1.4 litros y 80 caballos - 20.000 kilómetros/año

• Seguro a todo riesgo con franquicia - 379 euros/año
• Impuesto de circulación = 58,87 euros
• ITV a los 4 años = 67,92 euros (16,98 euros/año)
• 50 litros de Diesel para 800 kilómetros - 65 euros (1.625 euros/año)
• Cambio de aceite cada 15.000 kilómetros - 80 euros (53 euros/año)
• Cambio de aceite y filtros cada 30.000 kilómetros - 150 euros (50 euros/año)
• Cambio correa de distribución cada 120.000 kilómetros - 400 euros (66 euros/año)
• Cambio de neumáticos cada 40.000/50.000 kilómetros - 200 euros (98 euros/año)
• TOTAL 2.347 euros/año